Star Wars. Un Nuevo Comienzo

Capítulo 14

Sorprendido por el cambio tan repentino en el muchacho fue al Templo Jedi, el mensaje que el Consejo le había enviado lo guiaba a una reunión importante, de camino a la sala de reuniones se encontró con su antiguo maestro.

—Anakin, no esperaba verte tan pronto—saludó Obi-Wan.

—Si..., bueno, tuve un pequeño problema—admitió Anakin con una mueca.

—¿Pequeño para quién? ¿para las personas normales o para ti?—preguntó Obi-Wan conociendo a su amigo.

Una sonrisa traviesa asomó en el rostro de Anakin

—¿Hay mucha diferencia?

Obi-Wan negó con la cabeza divertido. Ambos siguieron su camino hasta la sala del Consejo, después del saludo habitual Anakin empezó a hablar.

Poco después de enviarle el mensaje a Padme sufrió una emboscada, estuvo cautivo durante un tiempo hasta que aprovechó un descuido de sus raptores y escapó, consiguió su nave y volvió a Corusand tan rápido como pudo.

Claro que a los maestros no les dijo nada respecto al mensaje de Padme, se podría decir que lo habían atrapado distraido. Dicho esto los maestros discutieron sobre quien podría haber planeado el ataque.

Anakin no prestó mucha atención de lo que hablaban, mientras los maestros discutían él sólo pensaba en su familia y que había pasado en el tiempo que pasó afuera, necesitaba ver a Padme, abrazarla, sentirla entre sus brazos, también ocupaba hablar con Luke, según le había dicho Obi-Wan, el chico estaba dispuesto a hablar, pero necesitaba a alguien de confianza, ahora lo entendía, el chico no quería defenderse, quería que lo defendieran, que "él" lo defendiera.

Al terminar la reunión fue a la pista de despegue y tomó su nave, dio varias vueltas en círculos, para asegurarse de que no lo siguieran, y volvió a su casa, quiso hablar con Luke en cuanto llegó, pero ya era muy tarde y el chico estaba durmiendo, sin poder hacer más que esperar hasta al día siguiente se fue a su habitación, se quitó la camisa y se acostó junto a su esposa, la rodeó por la cintura y descansó la cabeza en la almohada, una sonrisa se escapó de los labios de la senadora, se volvió y lo besó con ternura.

—Te amo—murmuró Padme sin separar sus labios.

—También yo mi ángel—sonrió Anakin abrazándola.

—¿Ani?—llamó Padme después de una pausa.

—¿Mmm?

—¿Viste a Luke?—preguntó Padme con suavidad.

—Sí, pero no pudimos hablar, en ese momento me llamaron del Consejo.

—Está asustado Ani, él intenta que no lo veamos, pero lo veo, se le nota en la mirada.

—Lo sé y tiene todo el derecho de estarlo.

—Sí, él más que nadie tiene ese derecho, pero no podemos permitirnos que está situación empeore, no lo merece.

Su esposa asintió tan preocupada como él.

Ambos no tardaron en quedarse dormidos en los brazos del otro y Anakin se sintió la persona más afortunada del universo por poder tener a aquella familia tan especial y por un segundo sintió que todo sería perfecto, pero la tranquilidad no duró mucho.

—"Papá, papá... por fa...vor, ¡ayúdame!"