¡NO VUELVAS!

-¡VETE!

-Pero mamá...

-¡TE HE DICHO QUE TE VALLAS!

-¿Mami? por favor... perdoname.

-¡VETE YA, O LLAMO A LA POLICIA!-grito su madre desesperada, cubriéndose el rostro con sus delicadas manos,tirada en un rincón de la sala.

-Mamá lo siento, no quise hacerlo -dijo llena de arrepentimiento.

-¡VE-TEE! -le grito su madre con todas sus fuerzas.

-¡LO HICE PARA PROTEGERTE!-grito, arrepentida por lo que había hecho.

-Largate- contesto su madre con odio.

Dicho esto Rose corrió a su cuarto, sin poder contener sus lágrimas cogió su valija y metió todo lo que estaba a su alcance; cuando ya no cabía mas, Rose recorrió su cuarto tatuando en su mente cuando ella y su madre reían sentadas en el pie de su pequeña cama, con impotencia rompió la lampara de noche que estaba junto a su cama

-¡MIERDA!- grito enojada, sentándose en el sillón de una esquina de su pequeño cuarto apoyo sus codos en sus rodillas cubriéndose los ojos con las manos lloro como si no hubiera mañana.

Bajó con lentitud con los ojos rojos e hinchados,caminó hacia la sala donde se encontraba la salida, miró por ultima vez a su hermosa madre que todavía se encontraba en la esquina con la mirada perdida en el cuadro junto a la puerta trasera tenia los ojos llenos de lágrimas.

-Te amo - dijo Rose saliendo de la pequeña casa.

-¡TE ODIO! ¡NO VUELVAS!-gritó su madre mientras Rose cruzaba el jardín trasero.