Victoria... La reina de la moda estaba enamorada... Completamente enamorada... Pero tenía miedo... Tenía miedo de otra vez sufrir... Con Juan Pablo, su primer amor, las cosas sucedieran entre dos personas puras y que no estaban destinadas a ser... Su ex marido Osvaldo la engañó, la traicionó... Pero Heriberto... Heriberto era el indicado? Sería él su destino? Se habían besado dos veces... La primera vez él la besó... Fue un beso tierno, suave... Sintió algo que jamás sintió antes en un beso... Sintió que jamás había estado enamorada de verdad... Pero hoy, en el pasillo del hospital fue ella quien tomó la iniciativa de besarlo... Fue un beso más apasionado... Ella quería sentir de nuevo lo que él la hizo sentir en aquel primer beso y vaya que sintio aún más... Esa vez pudo sentir mejor sus labios, su lengua, sus dientes... Sintió tantas cosas que eso la asustó y se fue de allí dejándolo sólo en el pasillo...
Heriberti aún estaba sin creer lo que había sucedido en aquél pasillo hace rato... Ella lo besó... Ella se acercó a él y lo besó, lo besó con ganas... La sintió vibrar entre sus brazos y aún no lo podía creer... Estaba enamorado desde el momento que la conoció... Se quedó encantado por su belleza, por su mirada, su sonrisa, su fiereza, su altivez, su cuerpo... Se quedó encantado por todo en ella... La amaba!
El día siguiente...
V. Mira Antonieta! Estoy temblando! No sé si puedo hacer esto...
A. Estás enamorada y nerviosa... Es normal! Y sí! Debes hacer eso! Llámalo! Ya!
Victoria entonces busca su número y llama...
H. Bueno!
V. Hola Heriberto, como estás?
H. Mi dulce Victoria! Que sorpresa! Estoy mejor ahora que hablo contigo. Que se te ofrece?
V. Bueno... Quiero... Yo... Es que...
H. Estás bien?
V. Si si... Lo estoy... Ay que pena me da! Nunca hizo eso antes!
H. Que nunca hizo antes Vicky? Cuéntame...
V. Invitar un hombre a cenar...
H. Hmmm así que quieres invitarme a una cena?
V. Si... Pero.. Olvidalo, debes de estar mucho ocupado. No sé en que pensaba cuándo te llamé. Perdón, adiós.
H. No no no! No cuelgues! Yo acepto tu invitación.
V. De verdad?
H. Sí, de verdad. Me muero por verte otra vez mi dulce Victoria...
V. Entonces... A las siete? Vienes por mi en la Casa de Modas.
H. Estaré ahí a las seis!
V. Y porqué tan temprano?
H. Para que no huyas de mi como ayer...
V. Yo no... Ya, ya sé que fui una cobarde... Pero quiero disculparme personalmente...
H. Puedo perdonarte se me regalas otro beso...
V. O.. Otro beso? No no sé si puedo...
H. No te pongas nerviosa mi vida. Nos vemos luego. Te quiero!
