-El circo macabro de los payasos asesinos-

Parte Única

-El circo macabro de los payasos asesinos-

¿Cómo es que había terminado dentro de aquella locura?, ¿Era real todo aquello que pasaba frente a sus ojos?, ¿No sé suponía que aquel lugar fuera un lugar para divertirse un rato?, ¿para entretenimiento familiar? Entonces... ¿qué era todo aquello? Aquello sólo era... un circo de masacres sin sentido.

Fue un miércoles, después de su entrenamiento espartano, cuando recibió un mensaje de su excapitán diciéndole acerca de un extraño circo ambulante que llegaba ese fin de semana a Tokio, ¿curioso, no?, normalmente él no se interesaría en ese tipo de cosas, pero tomando en cuenta que desde que cierto tigre le contó sobre lo bonito que era estar en un show de esos, su curiosidad se manifestó de forma infantil.

Tomando su celular sólo pudo contestar un "Gracias por la invitación", ¿estaría bien decirle al pelirrojo de su luz sobre aquella invitación?, suponiendo que Akashi-kun invitaba al resto de la generación milagrosa, estos por consiguiente llevarían a su pareja, por no decir de aquellos colados o invitados improvisados, en fin, aún quedaba unos días para que pudiera avisarle sobre si iba a ir o no y también si iba acompañado o no.

Se dirigió hacia los vestidores y ahí encontró a su tembloroso amigo castaño con una gran sonrisa en el rostro, al parecer algo lo había puesto muy feliz y tenía en mente que pudo haber sido, y es que... ¿Quién diría que su excapitán y Furihata-kun llevaban una maravillosa relación de más de 6 meses? En fin teniendo en cuenta el mensaje anterior recibido y viendo la emoción del otro, ¿Quién no se animaría?

-Furihata-kun, al parecer Akashi-kun ya te comentó los planes para este fin de semana, ¿no es así?- preguntó con su típico tono tranquilo.

-¡AHH! ¡Kuroko! No te aparezcas así...-dijo con gran terror, y es que a pesar de todo aún no se acostumbraba a las "apariciones" repentinas del peliceleste.

-He estado todo el tiempo aquí- replicó inocentemente.

-Sí, lo que digas... Con respecto a tu pregunta, Sei me acaba de decir sobre ir a ese circo que vendrá, ¿no crees qué es una locura?, digo siendo sinceros es algo particularmente muy raro...

-¿Qué es algo raro?-preguntó curioso Kagami, quien acaba de salir de las duchas y se había encaminado a los vestidores cuando alcanzó a escuchar sólo lo último dicho por el castaño.

-Akashi-kun nos acaba de invitar a un circo que vendrá a la ciudad- explicó rápido el peliceleste.

-¡Wow! ¿Pensé que en Japón eso no sucedía?- preguntó un poco extrañado el pelirrojo, ya que el tiempo que llevaba viviendo ahí no había ido más que a carnavales y festivales, pero nada como un circo.

-No vivimos en otro mundo, Kagami-kun, simplemente son algo ocasionales como este.

-Aun así, sigue siendo muy raro... -comento con cierto temor el número 12.

-Vamos Furi, si es a como dice Kuroko, entonces debe ser una gran oportunidad-dijo con entusiasmo el más grande mientras palmeaba levemente el hombro del chico.

-Está bien... -dijo con desconfianza el chihuahua.

-Bien si es así, avisaré a Akashi-kun que también vendrás, Kagami-kun- tomando su celular decidió enviar un mensaje al pelirrojo menor informándole de su respuesta.

Así como tomaron aquella decisión, cada quien se encamino a su respectivas casas, siendo sombra y luz quienes caminaban tranquilos tomados de las manos, y es que apenas llevaban 2 meses de relación, por lo cual para ellos aquello era algo normal y necesario.