1

11 1 0
                                    

He empezado a entenderlo. Amar es destruir. Pero esto se deja muchos matices.
Amar a alguien por encima de uno mismo, es destruir.
Destruirte tú para completar lo que, en apariencia, le falta al otro.
Aunque no lo pida ni lo quiera.
Te destruyes.
Lo malo, e inevitable, es cuando te deja. Porque ahora te faltan piezas de tu propio ser. Y eso es muy difícil de recuperar.

octubre 2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora