Pensar que ya casi quebranto esa promesa me aterra, a medida que caminaba sentía que mi respiración ya se normalizaba
Me senté en una de las bancas de la parte frontal del colegio, no quiero regresar y el receso está a punto de acabar en fin me toca matemática y voy muy bien en su materia una clase no hará la diferencia.
Decido quedarme en la banca y no ir a la clase de matemática. Apoyo mi espalda en la banca y sierro mis ojos dando un largo suspiro suelto todo el aire pero mantengo mis ojos cerrados pasan apenas unos segundos cuando siento que alguien se sienta a mi lado.
«No, no por favor que no sea un profesor, por favor que no sea un profesor»
Lentamente abro mis ojos al ver quien estaba a mi lado abro mis ojos al punto que mis retinas arden tal vez a ustedes no les sorprenda pero a mi si, mi estomago y garganta arden hecho que hace que de mi no salga ninguna palabra ¿Qué es esto?
El tiene la vista puesta asía el frente con su típica cara de despreocupación gira su cabeza para poder verme y en su rostro se forma una sonrisa de lado dejando ver uno de sus hoyuelos los cuales poco a poco me voy acostumbrando, le devuelvo la sonrisa que para mi sorpresa sale muy fácil a pesar de no sentirme muy bien (poco a poco me voy haciendo experta en sonrisas falsas).
Ahora que lo tengo tan cerca me doy cuenta que tiene unos ojos cuya pupila es color café oscuro casi llegando a confundirse con el negro de su iris pero eso hace que se vean más brillantes lo cual acompañado con su piel suavemente clara le da un tono cálido para ser alguien tan poco social y con no muchos amigos (al menos en el salón), ahora veo porque todas mueren por salir con él no es tan feo ¿qué estoy diciendo?
«Acéptalo Sam, es muy guapo»
« ¡Claro que no!»
« ¡Acéptalo!»
-Hola- dijo en tono calmado, sacándome de mis más profundos pensamientos.
-Hola- respondí de la misma forma, desviando mi mirada asía al frente.
-¿estás bien?
-Aam si, ¿Por qué?
-Es que, vi que saliste prácticamente volando de la cafeteria, entonces me pregunte que si te había ocurrido algo.
-Noo, s, si estoy bien- ¿tartamudeo?
-Claro estas tan bien que tienes los ojos rojitos como si estuvieran a punto de derramar lagrimas- en ese instante una lagrima recorre por mi mejilla tal vez de las que se quedan estancadas en tus parpados dudando si salir o no y esta decidió este preciso momento para realizar su aparición, se me había olvidado la facilidad con las que salen mis lagrimas por más que intenté retenerlas estas exigen en salir tal vez sea porque casi nunca lloro y aprovechan las pocas oportunidades que se les presenta.
Cristian levanto su mano limpiando la solitaria rebelde lagrima, en el momento que las yemas de sus dedos lograron hacer un suave roce con mi mejilla un escalofrió recorrió todo mi cuerpo, poco a poco limpio la pequeña lagrima pero dejo su mano suavemente poyada en mi mejilla mientras que con su pulgar trataba de limpiar el débil camino húmedo que la lagrima dejo, mis ojos se encontraron con los suyos ¿en qué momento llegamos a estar tan cerca uno del otro? Lentamente sus ojos se dirigieron a mis labios lo cual me hiso tener una pequeña corriente de nervios sobre mi ¿Qué iba a hacer? Acaso ¿me iba a besar? ¿Iba dejar que me besara? Y ¿Qué él fuera mi primer beso?, ¡apenas nos acabamos de empezar a tratar Dios!
Lentamente se iba acercando mas y mas a mí su mano seguía descansando en mi mejilla.
-¿Cristian?- dije en un susurro.
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"No Te Ilusiones"
Genç Kurgula vida funciona mejor si no te haces ilusiones, pero lamentablemente eso no esta en nuestras manos, enamorarse es algo que hasta a la persona mas fria, sin sentimientos le pasa. Porque enamorarse no es malo lo malo es de quien nos enamoramos, porqu...