Parte única.

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Taeyong acarició el cabello castaño de Donghyuck. Sus dedos se movían con suavidad. Las hebras un poco curvadas se enredaban levemente en la gran mano del mayor.
El moreno cerró lo ojos. Le encantaba la sensación. Le causaba un poco de sueño, pero era lo de menos.

El mayor sonrió con ternura. Sus manos se regocijaban por lo bien que se sentía. Le gustaba mucho darle mimos al maknae. Y por eso, hoy sería muy amable con Haechan. Sentía de que no le otorgaba el cariño que se merecía. Así que abandonaría aquel injusto actuar y se convertiría en un hyung en el que el menor de todo NCT 127 pudiera confiar.

- Donghyuck, tu cabello es tan suave y lindo. - dijo Taeyong. - Es sin dudas el más lindo que he visto en vida. - aseveró Taeyong.

El menor se sonrojó por el comentario tan cursi. Y no atinó a decir nada. Sólo se mantuvo en silencio.

- Tu piel también es muy suave. El tono moreno es encandilante. - dijo Taeyong, seguido por una leve risa.

El moreno estaba intranquilo, ¿qué pasaba con Taeyong aquel día? Estaba muy cariñoso, era poco habitual en él.

- Ah, hyung, ¿de qué estás hablando? - preguntó Haechan.

Las caricias en la cabeza de Donghyuck fueron mucho más lentas y delicadas. La mano del mayor bajó a su nuca. Incluso a su cuello. El menor tembló.

- Estoy hablando de lo lindo que eres. - respondió Taeyong.

Sus manos comenzaron a sudar. Y su rostro enrojeció. Agradeció desde lo más hondo de su corazón el que Taeyong estuviera tras él. O sino, lo habría visto en tal estado.

El pelirosa se detuvo abruptamente. Su expresión era seria. Haechan estaba muy nervioso.

- ¿Quieres salir a algún lado? - preguntó Taeyong.

- ¿Y eso?, ¿por qué tan repentino? - preguntó Haechan.

- Yo pregunté primero. - dijo Taeyong.

- No. Yo quiero practicar una vez más. - dijo Haechan, intentando escapar.

- Vamos. Te acompaño. - dijo Taeyong, con una sonrisa amable.

- ¿Seguro? - preguntó Haechan.

- Sí. - afirmó Taeyong.

Donghyuck lo miró inquisidoramente.

Al llegar al recinto, Haechan no podía dejar de observar al mayor con una expresión de extrañeza. ¿Qué mosca le había picado?

Dejaron sus bolsos en un sector de la sala de prácticas. Y el moreno se dispuso a ensayar. El mayor se le acercó para hacerlo también.

Donghyuck no lograba concentrarse. Taeyong estaba muy raro. Aquello provocó las múltiples fallas en los movimientos del menor.

El pelirosa se detuvo. Sigilosamente, se ubicó detrás del moreno y movió sus brazos hacia donde debían ir. Y, con la misma suavidad con la que hace un rato había acariciado su cabello, el mayor arrastró sus manos sobre la piel del menor.
Donghyuck sentía la respiración de su hyung tras de él. Estaban muy cerca del otro. Sudaba demasiado y no por la práctica. El toque del pelirosa provocó la piel de gallina en el castaño. Aquello era ya el colmo para el menor. Debía detenerlo.

Haechan trató de librarse de las garras de Taeyong. Sin embargo, el mayor aprovechó el movimiento del menor para así darle una vuelta y tenerlo frente a frente. El moreno casi tropieza por el giro inesperado. Y Donghyuck se dio cuenta demasiado tarde de que ya se encontraba a la merced del mayor.
Sus rostros estaban tan cerca que el moreno se congeló. Taeyong sujetaba al moreno de la cintura. Haechan intentó empujarlo. Taeyong, sonriéndole, comenzó a tocar su cintura, provocando el retorcimiento del menor. El mayor sabía de que aquel era su punto débil para las cosquillas. Donghyuck estaba a punto de explotar en carcajadas. Sin embargo, la situación llegó a su fin tan pronto como comenzó.

Baby don't like it. [MarkHyuck]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora