La vida de Jess

5. Lástima

Después de ese mal trago, Carlie y yo fuimos a clase, y dió la casualidad de que estaba Amanda.

-No quiero entrar Jes- me susurra Carlie.

-Si te ve bien, le molestará mucho mas que si te ve mal, así parecerá que te importa -le aconsejé.

-Pero... ves con..

-Si- la corto - siempre iré contigo.

Entramos y estaba Amanda , que se enfadó por ver a Carlie sonriendo. Estaba Jon, con su amigo el rubio, parecía muy cabreado. 

Después de aquella clase, vino la siguiente, y la siguiente...Hasta las tres.

Le dije a Carlie que llamase a su madre, porque venía a mi casa a comer, luego iríamos a una biblioteca. Mientras andábamos para ir a mi casa, apareció Jon.

-¿Os llevo?- pregunta.

-¿No lo pillas?- le contesto mal.

-¡Sii!- dije Carlie, como una niña pequeña.

-Si lo dice Carlie...- me mira Jon.

Enseguida Carlie se subió en la parte de detrás.

-Vamos Jes- me dijo entusiasmada.

-¿Estas mejor Carlie?- le pregunta Jon, ella asiente. -Que sepas que ese rubio no va a molestarte más.

-¿Por qué?- pregunta ella.

-Le he dado su merecido. - ella sonríe.

-Gracias.- le dice.

-Debemos hablar Jessie. - me dice.

-No quiero hablar Jon, de verdad. - le digo. -Tengo muchos problemas y no necesito uno más.

-Venga, como con vosotras hoy. - dice.

-¡Bien! Vamos a comer a casa de Jes, va a hacer macarrones.

-Que bien - le contesta - me encantan los macarrones, sobre todo con Jessie. - me mira provocándome.

-Callate.- me río.

Después de aparcar, entramos a mi casa. Carlie se siente como en la suya.

-¿Jes puedo ducharme? Es que...- le da vergüenza.

-Claro Carlie, no hace falta que preguntes. Yo hago la comida.

Empiezo a prepararlo todo, la verdad es que Jon si que me ayuda bastante.

-Corta el bacon- le pido.

-Encantado- me contesta. -Jessie.

-Jon- le digo.

-¿Que le pasa a Carlie?- me pregunta.

-A Carlie no le pasa nada - le contesto.

-Por favor - dice Jon.

-Tiene un retraso leve, le faltó oxigeno al nacer - le cuento. -La conocí al entrar aquí. Tiene mucha ayuda, pero la principal yo, la cuido, la ayudo...A veces es como una niña pequeña, lo ve todo tan simple.

-¿En el instituto lo saben?- pregunta.

-Los profesores si, pero los alumnos la tienen como la retrasada, no debe enterarse nadie Jon -me giro y él está detrás mía.

-¿Por qué no?-me pregunta susurrándome.

-Porque quedan cinco escasos meses, y quiero que se sienta normal, eso es lo único que quiere ella. - me giro rápidamente, quiero evitar cualquier cosa de la que pueda arrepentirme.

-Solo cinco meses -se dice a si mismo apenado...-Has cambiado mi forma de ver las cosas, y solo hace tres días que hablamos.

-No hablamos, solo que eres un pesado. Jon, se que existes desde primer grado. - le digo. -No te hagas la víctima.