Capítulo Único

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  — ¡Estaremos en mi habitación mamá!—Los chicos subieron corriendo las escaleras mientras escuchaban a la madre del mayor reír ligeramente.

Si supiera lo que las paredes de aquella habitación escondían.

Era cierto que el mayor tenía la pinta de no ser para nada de ese estilo, es más, ninguno de los dos lo parecía.

Nada es como te lo imaginas.

Una vez llegaron a la habitación se echaron en la cama juntos, entrelazaron sus manos como si su vida dependiera de ello, sus corazones estaban desbordantes de felicidad y nerviosismo.

Temían ser atrapados.

No. No sabían qué era lo que les estaba sucediendo, sólo sabían que les gustaba sentirse así, rebosantes de alegría. Enamorados.

Y así era cada día de su vida, llegaban del colegio donde asistían juntos, iban a sus casas a cambiarse y después se dirigían a la casa de alguno de los dos, se encerraban en la habitación y conversaban o jugaban, pero en todo momento ambos tenían contacto físico con el contrario.

  — Jeonghan, cariño, ya está la comida. Bajen, por favor.

  — ¡Ya vamos, mamá! — Los chicos se rieron y se dieron un fugaz beso en los labios para después sonreír. Salieron del cuarto con una cierta distancia, debían guardar apariencias hasta armarse de valor, si.

Tan pronto terminaron de comer volvieron a dirigirse a la habitación de Jeonghan para jugar, ya entrada la noche el pequeño Joshua tuvo que regresar a su casa sino se preocuparían por él.

Los dos eran mejores amigos. Eso intentaban aparentarle a todo el mundo, iniciaron así.


†   †   †



Pasaron muchos años, los sentimientos nunca se extinguieron, la llama incrementó con el paso del tiempo, pero con ello también el miedo de la pareja a mostrarse.

Todo se debía a situaciones que habían vivido en ambientes familiares.

  — Joshua amor, ¿podrías esperarme un momento? Tengo que ir a la tienda de zapatos -la madre del nombrado señalo una pequeña tienda frente a ellos- no me tardo.

Joshua como solía ser sólo asintió y sonrió cálidamente.

No pasó mucho tiempo para que su madre volviera con una bolsa entre sus manos.

Con lo que no contaban era con que una pareja de hombres iría pasando entre ambos, madre e hijo los observaron. Los chicos estaban tomados de la mano, su diferencia de estatura era tierna, y se sonreían como si lo único que importara fuera el chico frente a sus ojos. Joshua sonrió cálidamente.

¿Así era como él y Jeonghan se observaban?

La señora y Joshua los observaron hasta perderlos de vista, cuando volvió la mirada a su dulce madre se quedó anonadado. La mujer tenía un gesto de disgusto total en su rostro.

  — ¿Cómo pueden hacer esas cosas en pleno ambiente público? —Joshua quiso creer en lo más profundo de su corazón que su madre no quería ser despectiva por lo que lo dejó pasar sin decir una sola palabra.

Y algo similar le ocurrió a Jeonghan.

Estaban de vacaciones con su familia en una playa, estaban bajo sombrillas. Jeonghan estaba protegiéndose del sol junto a su padre, miraban a su madre y hermana que estaban jugando en el agua.

La mirada del señor se desvió de su familia a otro punto, algo que Jeonghan no notó.

  — Qué asco. Ese par de maricas no deberían estar haciendo eso en publico.

¿Amarte es pecado? [ JIHAN ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora