Treinta y ocho

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—No quiero hacerlo —retrocedí, pero Blaz me tomo por los hombros y me sujeto.

— ¿A caso eres una gallina? —cuestionó.

Ambas nos encontrábamos a metros de la casa de Theo, se escuchaba la música muy fuerte y me había arrepentido de venir.

Él no me invito, por algo no lo hizo, tal vez estaba invadiendo su espacio.

—Velo de esta forma —murmuré—. Tu no quieres ver a Dean ni yo a Theo, vamos a comer algo y le diremos a Leyna que si vinimos.

—No Keila, este es el momento donde debo ser una buena hermana mayor —se negó.

— ¡Buena hermana mayor! —chillé—. ¡Tú nunca has sido una buena hermana mayor!
—Pero este es un buen momento para serlo —se quejó.

—Si quieres ser una buena hermana mayor no me obligues a entrar.

De repente me tomó fuertemente del brazo y tiró de mí hasta la puerta, negué al ver como su mano se dirigía al timbre.

¿Quién mierda debe tocar el timbre para entrar en una fiesta?

—Hola —Dean Burton estaba frente a nosotras.

—Hola jefe —intentó sonreír Blaz y soltó mi brazo.

—Señorita Buch —asintió y me miró a mí—. Cuñada —me beso la mejilla.

Espera ¿¡Cuñada!?

— ¿Q-qu-qué? —tartamudee.

— ¡Cuñada! —chilló una pelirroja con poca ropa caminando hasta Dean.

—Sí, la novia de...

—De Kath —asintió la pelirroja—. Siempre supe que le gustaban las mujeres.

La miré con el ceño fruncido, ¿Quién se creía que era? ¿A caso esta era otra Kelly?

—No soy la novia de...

— ¡Keila!

Bufé, ahora todos nos dan la bienvenida, claro, todos menos Theo.

—Hola Luka —saludé con un intento de sonrisa.

— ¿Dónde está Leyna? —una pequeña risa se escapó de Blaz.

—Tu novia no vino —reí.

¿Había alguien más tierno que Luka?

— ¿Cómo están mis cuñadas? —nos abrazó Luka.

—Y tu ¿novia de quién eres? —nos miró mal la doble pelirroja de Kelly.

—De Dean —hablo obvio Luka.

Mire a Blaz, ella miraba nerviosa sus zapatos, para quitar un poco la tensión de la escena hable a Dean.

— ¿Dónde está Theo?

— ¡Theo! —chillo la doble Kelly.

—Sí, Theo —la fulminé con la mirada.

Cuidado chicas, las historias de Wattpad engañan, ella no desapareció, rayita nos mintió todo este tiempo.

—Mi novio está en el sofá, ¿quieres hablar con él?

La miré intentando ocultar mi sorpresa, ¿por eso no me invitó? ¿La pellirroja es su novia?

—Mejor nos vamos —Blaz a mi lado murmuro, yo asentí tragando el nudo que se había formado en mi garganta.

—Adiós —sonrió la pelirroja desapareciendo dentro de la casa.

—Adiós —Dean habló.

Ambos entraron y Luka nos observó en silencio. Es todo tan raro.

—No le creas, ella es Allison —supongo que lo decía por la pelirroja—. Era la co-protagonista en la serie que grabó.

Y ahí la recordé, Allison era la chica con la que Theo se besó en esa serie, fruncí el ceño, yo no la recordaba pelirroja.

— ¿Teñida? —Blaz a mi lado estalló en carcajadas, y Luka asintió.

—Para que te quedes más tranquila, Theo desapareció luego de que empezara la fiesta.

— ¿Por qué eso me debe dejar más tranquila? —Luka es muy malo para tranquilizar personas.

—Peleo con mis padres antes de la fiesta, él nunca quiso, mamá invitó las personas, no él.

—Pobre.

Tal vez por eso él nunca me invitó, él no planeó está fiesta, ni siquiera estaba aquí.

—Bien, adiós —Blaz besó la mejilla del chico y yo la imité.

(...)

Bufando entre a mi pieza, cerré con seguro para que Abby y Leyna no vinieran a atacarme con preguntas.

— ¿Dónde estabas? —chillé.

Miré sorprendida a Theo, se encontraba recostado en mi cama leyendo un cuaderno.

— ¿Qué haces con mi diario? —murmuré intentando quitárselo.

—Así que, soy sexy ¿eh? —sentí como el calor subía hacia mis mejillas.

—En mi defensa, lo escribí luego de ver la serie —intenté defenderme.

Tirando el diario bajo la cama se levantó quedando a mi altura.

— ¿Dónde estabas? —cuestionó.

—Por ahí —mentí.

Ni loca le decía que fui a su fiesta, a la cual no fui invitada y él no estaba.

—Fuiste a mi fiesta —afirmó.

— ¿Por qué soy tan mala para mentir? —me quejé.

—Debes dejar de morderte el labio cuando mientes —río.

— ¿Qué haces aquí? —lo miré y sonrío.

—Vine por mi regalo de cumpleaños.

Sonreí y por primera vez yo inicié el beso, pegué mis labios a los suyos intentando salir de la realidad.

Intentando olvidar que en unos días él se marcharía para cumplir su sueño y tal vez nunca más lo volvería ver.

—Te quiero —murmuró al separarse un poco.

Con la respiración agitada toque su pecho.

—También te quiero Theo —lo empujé y ambos caímos a la cama.

Y me olvidé de todo esa noche.

Solo éramos él y yo





¿Comentas?

Dejen volar su imaginación en la última parte.

Capítulo dedicado a @AlexiLou me reí mucho con tu respuesta.

Se acerca el final, ¿están preparadas?

Fangirl: Solo por tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora