Necesidad de precaución cuando se presume que se está haciendo un ataque
psíquico.— El efecto de un constipado negligido.— Focos sépticos.— El
diagnóstico y el tratamiento apropiados de las condiciones físicas son un
preliminar esencial.— Cualquier caso serio debería estar bajo la supervisión de
un practicante médico cualificado.— Efecto de los somníferos durante el dormir.
— Efecto del mar y las montañas.— Efecto de la comida.— Efecto del calor y la
presión.— Efecto de la dieta.— Todo trabajo psíquico ha de ser evitado por la
víctima de un ataque.
Hemos distinguido los diversos tipos de ataques psíquico, hemos descrito los
métodos que pueden emplearse en llevarlos a cabo, y hemos indicado también las
diversas formas de engaño, fraude y autosugestión que pueden complicar el
evento. Consideremos toda la cuestión desde el punto de vista práctico.
Suponiendo que un extraño venga con una historia de ataque psíquico, ¿cuál
debería sor nuestro proceder?
Debemos tener presente en primer lugar que hay una gran necesidad de
precaución al presumir que se está haciendo un ataque psíquico. Los ataques
psíquicos son cosas relativamente raras. No debemos asumir que estamos tratando
con uno hasta que hayamos excluido todas las otras cosas que posiblemente pueda
ser. No hace mucho me crucé con un caso de supuesta obsesión que resultó ser
una constipación descuidada, y que fue exorcizada efectivamente con aceite de
castor. Si hay cualesquiera síntomas físicos, incluso si no son más que un mal color
o un mal aliento, debería hacerse un diagnóstico por un practicante médico
cualificado, pues incluso si el problema tiene un elemento psíquico predominante,
su origen puede ser físico. Los focos sépticos son realmente centros de
descomposición, y como tales abren la puerta a formas bajas de vida elemental
cuya función es asistir en el retorno del polvo al polvo. Las impurezas en el torrente
sanguíneo puede envenenar el cerebro. Nuevos crecimientos o abscesos pueden
desarreglar sus funciones. Estas cosas sólo pueden ser reconocidas por el hombre
que entiende el cuerpo; siendo las otras cosas iguales, el hombre entrenado es el
mejor, y el hombre con el mejor entrenamiento es el hombre mejor, y el único
lugar donde puede obtenerse un entrenamiento adecuado en el diagnóstico es un
hospital general. Más aún, si las cosas se pusieran mal, la única persona que pueda
sacar las castañas del fuego es la persona cuya firma aceptarán las autoridades
sobre un certificado. Suponiendo que el paciente resulte ser un lunático, ¿qué va a
hacer con él el practicante no cualificado? Una proporción muy grande de los casos
de supuestos ataques psíquicos resultan ser lunáticos o histéricos. El lunatismo