No tenemos ningún remedio.

☞CAPITULO NO.4

Al día siguiente salí del baño usando una falda que me llegaba un poco arriba de las rodillas color negra, una blusa de manga larga color beige y los mismos flats de ayer. Ya que iba a la cafetería con Alex desayunaría ahí, agarre mi bolso y el celular del desconocido y salí de mi departamento.

Pase a dejar el carro con el mecánico que era amigo de confianza de mi padre pero le dije que el no sabía a sí que era un secreto y me cobraría menos de lo que le pedí a Alex, pero no le diría por que me hizo perder el tiempo. Me lo entregaría dentro de un mes por que tenía mucho trabajo y por no cometer otro error dije que estaba bien con eso.

Camine hasta agarrar un taxi y me dirigí hasta el lugar que quedamos, le pague al taxi y salí. Ya eran las 11:20 a sí que esperaba que ya se encontrará ahí.

Entre y lo primero que escuche fue un relámpago y empezó a llover, fui con la cajera y pedí un café y ya que me lo entrego lo busque, y si ya había llegado.

-Hola- le dije con mi café en mano y sentándome.

-Hola, llegas tarde y tu dijiste que fuéramos puntuales- la verdad no le preste atención por que por dios nunca lo había visto tan sexy, Alex era súper guapo, tenía el pelo negro ojos negros y una barba que por dios y por todos los santos era súper sexy, y media como 1.80 todos los hombres deberían de ser como el físicamente por que su reputación la regaba bien gacho decían que cambiaba de novia como cambiaba de calzones a lo mejor ni usa calzones pensé.

- lo siento no te escuche- le dije

- que llegas tarde Sam-

- A sí que sabes mi nombre- fingí pensar y le dije- interesante-

- Jajajaja si me lo se como tu sabes el mío ¿Oh te olvidas que vamos en la misma UNi?-

- No- respondí - pero eso no es raro toda la UNi se sabe tu nombre por dios, eres Alex Evans el rompe corazones- cuando dije eso moví mis brazos .

- Que mal hablan de mi - bufo para luego mostrar una sonrisa de lado, ya sabía por que era el rompe corazones - pero vallamos al grano, y no al de tu frente por que creo que ya tiene muchos habitantes- y se río.

- ja ja ja súper gracioso- me empece a sentir incómoda por su comentario, bebí de mi café y le dije - ya enserio dame el resto del dinero por favor-

Saco su cartera y busco el dinero y si hice lo mismo pero en mi bolsa y buscando su celular, me acorde lo que paso ayer en la noche de la muchacha y espere a que me diera el dinero para así poder contarle, no se valla a arrepentir y no me quiera dar nada.

-Ten- tendió el dinero en sus manos y me lo entrego, le regale una pequeña sonrisa - necesito mi teléfono, no puedo vivir sin el -

Le di su celular y lo guardo en sus jeans que bien se le veían esos jeans y eso que no lo había visto parado, bueno y empece a decirle lo que sucedió la noche pasada.

- Alex , ayer iba en mi carro y tu teléfono no paraba de sonar y sonar y sonar y sonar-

- Ya entendí Samantha que mi teléfono suena y luego?-

- Bueno, conteste por que pensé que tal es una emergencia a lo mejor no puedas ir tu pero puedo ir yo y ayudar o algo así- se me quedaba viendo con diversión - y era una muchacha y mal entendió las cosas y me dijo zorra y dijo que terminaban y colgó-

Esperaba que se enojara o algo parecido pero en cambio sonrió.

- Ni modo ya paso allá fuera hay demasiadas mujeres a las cuales debo atender- me sentí aliviada y sonreí - que bonita sonrisa tienes- dijo.

- ¿Gracias?- lo hice en forma de pregunta por que eso no tenía nada que ver y se escucho un ruido proviniendo de mi estómago, tenía hambre y esperaba que no allá oído.

- Woww tienes un dragón ahí dentro- dijo y empezó a reír y me empece a reír también.

- Si, pediré algo de almorzar-

- Si claro yo invito-

-Okey - dije con una sonrisa y nos reímos de nuevo.

Pedí de almorzar un baguette de jamón con queso y el pidió lo mismo pero más grande.

Estábamos platicando sobre que estudiaba y cosas random de la vida y me entere que tiene asma.

Pagamos y el pago por lo mio como dijo. Todavía llovía cuando terminamos de almorzar, nos despedimos.

- Oye si tienes como irte ¿verdad?-

- No se sí sepas pero existen los taxis- dije con todo de voz burlona

- Si se que existen los taxis Samantha, pero vamos al mismo lugar te puedo dar un aventon- dijo subiendo y bajando sus cejas.

- gracias- sonreí y salimos de la cafetería corriendo hasta su camioneta.

Llegamos a su camioneta súper mojados ya que la estacionó súper lejos.

- Oye si quieres podemos pasar a tu casa para que te cambies-

- Si, gracias - le fui dando la dirección hasta llegar a mi departamento.

-No inventes vivo a dos cuadras de tu casa-

- No es una casa es un departamento , torpe- estaba a punto de decirle que vivo sola pero que tal y es un asesino en serie.

- Bueno, señorita te dejo y vuelo por ti en 20 minutos SE PUNTUAL- dijo y me baje de la camioneta con cuidado ya que llevaba falda y aparte no quería una pierna rota.

Entre derechito a mi baño.