Capitulo 3

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- señorita  Anni déjeme decirle que tiene 15 fallas en su calendario universitario y asiste solamente 1 de 4 veces a la semana, no cree que está por cumplir un récord.

- talvez... Pero mire el lado positivo tengo buenas calificaciones y un buen manejo del vocablo.

- bueno particularmente eso no nos interesa asi que hemos decidido que tendrá que hacer algunas obras en pro de la comunidad y le hemos asignado un asesor.

-no necesito un asesor, sabe que voy a cumplir  con las obra.

- de eso no estamos seguros ya que se  ha saltado 8 veces esta orden .

-esos solo fueron simples descuidos.

--- suena la puerta--- y entra una cara conocida.

- za-zayes!! *palmada en la frente* esto no puede ser cierto.

- mucho gusto señorita Anni soy su nuevo asesor el señor sain.

-mucho... Gusto

-bien ya se presentaron ahora pueden continuar con la labor desde hoy mismo. Retirense de mi despacho.

A:si señora

****fuera de la oficina ****

A: ¿que haces aquí? ( voz baja)

Z: ¿como que qué hago? Estoy protegiendote, es mi deber como novio.

se acercó a mi y me robó un beso en pleno pasillo. Continuando su frase.

Z: ¿es que ahora no puedo proteger a mi propia novia? *sonrisa*

A: de que hablas.. Nos pueden ver, se supone que aqui eres mi asesor no mi novio.

Z: no hay problema lo puedo gritar, la verdad no me importa que se enteren.

Todos escuchen!! ¡Esta sexy y hermosa chica de aquí es mi novia! ¡Solo yo tengo autorizado a tocarla! Asi que,  el que se que llegue a hacerlo! *mirada seria*-lo mataré...

A: ... Zayes... - _-'

K: Era broma era broma *sonrisa* >. <
¡Pero la primera parte era totalmente cierta! (levantar mas la voz)

A: ¿pero que haces? ¡Ya no grites!

K: realmente no me interesa decirlo públicamente.*mirada pícara*

Zayes solo se hizo oidos sordos a mis quejas, luego me levantó y entrelazó mis piernas a su cuerpo, arrecostandome contra la pared de aquel pasillo donde pasaba inmesidad de gente.

Z: que tonta eres, ¿crees que no tengo la fuerza para volvernos invisibles? Por ningún motivo te daria problemas, y como ahora somos invisibles eso quiere decir que podemos hacer lo que queramos en este gran y visitado espacio público.

Acarició mi cuello y empezo a darle pequeños besos y uno que otro mordisco.

*admito que estaba a punto de convencerme de tal locura* pero debía volver a mis cabales.

A: ¿los angeles suelen ser tan pervertidos?

Z:bueno que te puedo decir, luchar con tantos demonios, encendió mis instinto.

A: ja'que tonterias dices, asi que ¿simplemente te convertistes en mi asesor por esto? Eres el culpable de que tenga tantas fallas y mas vale que me ayudes en esas obras de caridad.

Z: como tu mandes.

Me bajó y me tomó mi mano

Z: bueno ahora vamos.

sombras del mas alláDonde viven las historias. Descúbrelo ahora