La familia Uchiha

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Hola chicos, este capítulo está SIN CORREGIR, así que disculpen los errores. Espero que les guste, no se olviden de VOTAR y COMENTAR.

Esa misma noche, Sarada, Sanosuke y los gemelos Uchiha estaban en la sala, cuando la puerta de la casa se abrió. Sus padres por fin habían regresado, Sanosuke fue hasta ellos para saludar, Sakura aprovechó la oportunidad para apachurrarlo.

- No respiro mamá!!

- Perdón. ...

- Bienvenidos- Sarada se acercó a sus padres.

- Todo está bien?- Sasuke miró a su hija mayor y luego a los más pequeños, todos se veían bien.

- Estamos bien. Vayan a asearse y cambiarse, mientras yo arreglo todo pado para cenar, o están muy cansados.

- Estamos bien, partimos en cuanto pudimos para llegar antes del anochecer. La verdad la mujer no estaba grave, pero el Señor Feudal quería estar seguro.- Sakura lucía algo exasperada.

- Sí, parece que tiene interés en el niño- completó Sasuke de forma sospechosa.

- Debe ser porque son familia- intervino Sarada.

- Es por eso, bueno vamos a prepararnos para comer Sasuke-kun.

Ella vio como sus padres subían a la segunda planta y le pidió a Sanosuke que se quedara con los gemelos mientras ella preparaba todo para comer.
Media hora después todos los Uchiha comían a gusto la cena, conversando sobre las novedades y la academia. A Sanosuke le iba bastante bien, era el mejor de su clase, además, de su creciente popularidad con las chicas.

- Escuché que Hanako* te ayudó a espantar algunas fans.

- Ella puede ser un fastidio, pero hoy ayudó....las niñas son molestas.

- ohh mi hijo se parece tanto a su padre. Me alegra que tengas una amiga como Hanako-chan.

- Sí, es bueno que alguien lo soporte con ese carácter- acotó Sadara con una sonrisa.

Sanosuke no debatió, sólo las miró enfuruñado. Sasuke veía a su familia con cariño y diversión, sus hijos se parecían mucho a él. Algunos sólo físicamente, otros también en personalidad. Por suerte, también, tenían gran parte de Sakura; Sarada se veía como él, pero su actitud y su forma de hacer las cosas le recordaba a su esposa, fuerte y amable con aquellos a los que amaba. Sanosuke, por otro lado, había heredado su personalidad, además de su físico. Eso le preocupaba, temía que fuese un niño solitario. A veces ese pensamiento lo perturbada lo suficiente como para que Sakura se fuera cuenta, por suerte ella siempre me daba ánimos y le hacía notar que Sanosuke tenía a una familia, también buenos amigos -no muchos, pero los tenía- que lo querían tal como era.

Pero....bueno...a pesar del carácter difícil y estoico, su hijo era un buen niño. Un orgullo para el clan Uchiha, al igual que sus hermanos. Al ver hacia el pasado, le sorprende en lo que se convirtió su futuro. Una esposa, una hija y tres hijos; la reconstrucción del clan estaba en marcha. Nunca más una sombra oscura se serniría sobre el clan Uchiha.

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En medio de una conversación animada la familia terminó de cenar, después todos los chicos se fueron a su habitación mientras Sakura termina de lavar los platos. Sasuke la observa con atención mientras se mueve de un lado a otro.

En silencio se levanta de su asiento para caminar hasta ella, la rodea con un brazo y le deposita un beso en el hombro.

- Estás muy cansada- susurra Sasuke.

-No. Ya termino con esto.- responde temblando.

- Déjalo así. Vamos a la recámara.- respondo Sasuke mientras acaricia el vientre expuesto de su esposa.

- Sasuke-kun- suelta ella escandalizada, pero no protesta y juntos suben a la recámara.

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Díez de la mañana, clima fresco y agradable en la aldea de la hoja.
Después de acompañar -temprano- a su hermano a la Academia Ninja, Sarada fue reclutada para ayudar a transportar documentos a diversas instituciones en Konoha. Luego de dos horas al fin había terminado. Mientras caminaba distraída un joven se le acercó.

Otro chico deslumbrado por el apellido Uchiha? Fue su primer pensamiento, pero cuando escuchó su voz está idea fue descartada.

- Sarada-chan- Yukiho le sonreía parado a su lado.

- Yukiho?

- No hay otro como yo. A dónde te diriges?

- A casa. Hoy no hay misiones.

- Un día para descansar. Deberíamos ir  a algún lado?

-No puedo. Debo regresar.

- Vale. Sé cuando no soy deseado.

Sin darse cuenta empesaron a caminar en la misma dirección mientras hablaban de forma afable.

- Sarada-chan- un chico se acercó a saludar a la joven y le dedicó una mirada suspicaz a Yukiho.

- Yatori! Vas a una misión?

- Sí, sólo quería saludar. Bueno nos vemos luego.- Sarada asintió con la cabeza y el joven se fue  sin dedicar una segunda mirada al otro Uchiha.

- Vaya, vaya un fan de Sarada. Interesante.

- No es un fan, sólo un amigo.

- Claro- parece que Boruto tendrá competencia. Será cuestión de vigilar a ese tipo.

Yukiho acompañó a Sarada un poco más en el recorrido, molestandola, a ratos, hasta que se percató de la presencia de Boruto. En una actuación convincente, fingió recordar que Midori le había encargado comprar unas cosas y se retiró.
Cuando Sarada se dio la vuelta dispuesta a continuar su camino se encontró con Boruto. El chico la observaba de forma sombría.

- Te acompaño a casa.

Ella estaba tan aturdida por su repentina aparición que no se molestó en indagar cómo sabía él cuál era su destino final. Al poco rato, el Uzumaki se animó a romper el silencio.

- Tú y Yukiho se llevan bien.

- Yo no diría que bien, apenas lo conozco, pero es agradable.

- Te parece atractivo?

- Qué quieres saber?- el silencio reinó -Él es atractivo - respondió al fin.
Boruto fruncio el seño, mientras el enojo lo consumía.

- Él no es el tipo de persona en la que debas fijarte.

- Por qué no?

- Yo  sé que a las chicas les parece atractivo, pero sólo le gusta jugar.

- No entiendo- Sarada lo ve intrigada.

- Tú no eres su tipo de chica.

Aunque no entendió el sentido completo de la frase, la sintió como una patada en el estómago.
Le acaba de decir poco atractiva? Pero antes de que pudiera enfrentarle,  él se giró y se fue. Habían llegado a la residencia Uchiha.

*Hanako: hija menor de Naruto y Hinata. Boruto la ha visto un par de veces y está trabajando en fortalecer  su relación.

Hasta el siguiente capítulo, GRACIAS a los que se toman el tiempo para comentar.

Pd: puede que esta historia mute un poco respecto a la primera versión, puesto que no recuerdo algunas cosas.

Cuando el sol dejó de brillar- BorusaraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora