Los últimos rayos del sol comenzaron a entrar en la habitación, colándose por las rendijas de la persiana. El silencio en esa casa era absoluto. Lo único que lo rompía de vez en cuando era la respiración entrecortada, el choque de los labios, los gemidos ahogados por caricias que querían grabarse en la piel como fuego ardiente. La ropa se encontraba desperdigada por el suelo junto a varios folios y rotuladores. Sobre la cama, Derek se encontraba sentado sujetando a Stiles por las caderas mientras éste se movía sobre él lentamente, subiendo y bajando. Apoyando sus brazos sobre sus hombros, Stiles tiraba de vez en cuando de su cabello, algo más largo. Rozando con sus dientes su cuello, con la fuerza justa para no hacerle daño, Stiles gimió roncamente, arañando la espalda de Derek.
Cuando la necesidad les sobrepasó, Stiles aceleró el ritmo de sus movimientos corriéndose segundos después. Derek le siguió, abrazándole fuertemente. Recuperando el aliento, Stiles se dejó hacer mientras sentía un suave sopor apoderarse de él muy lentamente. Quería maldecir al universo por completo por el hecho de tener que medicarse, pero llevaba varios días que tuvo que doblar la medicación a espaldas de su padre. Y de Derek, aunque a éste no le hizo falta mucho para saber que Stiles no estaba del todo bien y que algo le ocurría.
Tras insistir a base de miradas y silencios que no prometían nada bueno, Stiles le confesó que llevaba tres días teniendo unas pesadillas demasiado reales, en las cuales veía a Érica y Boyd en el hospital gravemente heridos. Lo peor era que él también estaba. El hecho de verse rodeado de tubos, máquinas y sedado siempre hacía que despertase peor de lo que hacía a menudo. Al sentir el dolor que le producía explicárselo, Derek le instó a que parase. Tan sólo eran eso, pesadillas y así quería hacerselo creer a Stiles. Pero algo le decía que quizás podían ser una señal de que algo realmente malo estaba a punto de ocurrir.
Por eso siguió abrazando a Stiles hasta que éste prácticamente se quedó dormido entre sus brazos. Alzándolo lo justo para dejar salir su miembro ya flácido, le acomodó sin dificultad en la cama, tapándolo acto seguido. De seguir así, su padre pronto se enteraría de lo que estaba haciendo y no era una buena idea. No después de que la ciudad decidiese que su adorado refugio dejaba de pertenecerle a él, aun siendo el único miembro directo superviviente de la familia Hale. Eso le hizo apretar los dientes con fuerza. Ellos no eran nadie para quitarle lo poco que le quedaba. Así que tuvo que buscar otro lugar donde poder reunirse con los chicos y con Scott pero para verse con Stiles tenía que aprovechar sólo los momentos en los que su padre salía a trabajar. Un cúmulo de circunstancias consiguió que sus momentos de intimidad se redujesen alarmantemente y las escapadas a la cabaña ya no eran una opción viable.
Para cuando Stiles despertó, ya estaba entrada la noche. Sorprendido, vio como Derek estaba sentado en la cama, ya vestido. Recordando que aún estaba desnudo y que necesitaba una ducha, se levantó refunfuñando. Derek le dejó hacer mientras permanecía en silencio. Stiles no tardaría mucho en enterarse del nuevo hallazgo de los chicos.
Tomándose más tiempo de la cuenta, Stiles se quedó en la ducha dejando que el agua caliente relajase sus músculos. Sólo cuando oyó unos ruidos fuera, cerró el grifo y cogiendo la toalla, se secó lo más rápido que pudo. Saliendo del baño con la toalla anudada, se topó con su padre en el pasillo.
_ ¿Papá? –preguntó realmente sorprendido mientras su cerebro asimilaba que su padre estaba allí mientras Derek estaba en su cuarto, con la puerta abierta y... Oh, Dios.
_ Hola hijo. ¿Has terminado ahí dentro? –preguntó mientras señalaba el baño-. Estoy molido y necesito una ducha urgentemente.
_ Sí, claro. Sólo... ¿qué haces aquí tan pronto?
_ Cambio de turno. Noto un cierto tono de preocupación en tu voz, Stiles. ¿Hay algo que quieras contarme? ¿O es que has traído a algún ligue a casa a escondidas?
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El Alfa entre los Alfas
FanfictionPortada by Lunadramal Derek y Stiles continúan con su relación a espaldas de ciertas personas pero la llegada de una nueva manada a Beacon Hills trastoca sus planes y de paso les ponen nuevamente en peligro a todos.