CAPÍTULO 1

24.6K 865 1.8K
                                    

Ya saben, esta serie no me pertenece :'v

(---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------)

Era un día como cualquier otro en el departamento de Kobayashi, ésta aun se encontraba dormida debido a que hoy tenía el día libre, por lo que Tohru, la dragona maid de tan peculiar hogar, dejó a Kanna, una linda y pequeña dragoncita, a la escuela.

Pero últimamente, la rubia se sentía un poco rara, su cuerpo sudaba demasiado, se sentía acalorada, y lo más primordial, sus partes privadas sentían un fuerte cosquilleo, y tenía unas ganas inmensas de actividad sexual.

TOHRU: -piensa- Acaso esto... Estoy en celo...? Tan pronto...? Pero... Debo concentrarme en hacer el desayuno para Kobayashi-san!!

Con esa forzada determinación continúa preparando un desayuno tipo americano (huevos, tocino y pan tostado), para que así, su amada pelirroja de gafas y ojos de pez muerto esté bien alimentada, aunque hoy descanse de trabajar.

En eso, se abre la puerta del dormitorio de la dueña de la casa, enfundada aun en su pijama, con el cabello suelto y bostezando como si no hubiera mañana.

KOBAYASHI: O... Ohayou, Tohru... -bostwza-

TOHRU: -levemente sonrojada- Ohayou gozaimasu, Kobayashi-san...

Es tan sexy con esa pijama...

KOBAYASHI: Dejaste a Kanna-chan en la escuela? Lo siento, no pude evitar levantarme tarde... -sentada ya frente a la mesa

TOHRU: -sonríe tiernamente, tratando de contenerse- N-no te preocupes, Kobayashi-san...

La eludida notó a su maid un tanto rara, y no dejaba de observarla mientras cocina.

Qué le pasa a Tohru? Nunca la he visto con esa expresión... Hasta parece que...

KOBAYASHI: -ya directa al grano- Tohru... Te ocurre algo?

TOHRU: -asuatada- N-no! No me pasa nada!

KOBAYASHI: Estás segura? -se acerca a ella con preocupación, tocando su frente con una mano- Estás ardiendo en fiebre...

... Fiebre, Kobayashi-san... Fiebre por hacerte mía!!!

TOHRU: D-de verdad me siento bien... N-no te preocupes...

KOBAYASHI: -suspira y apaga la estufa- Debes descansar, Tohru... Los dragones serán muy fuertes, pero también pueden enfermar... Así que ve a descansar, por favor... Y no te preocupes, yo terminaré esto tan delicioso que preparas...

La dragona no pudo evitar sonrojarse con ternura ante tal gesto de su amada, siempre buscando el bien de las personas, y dragones por igual...

TOHRU: -sonríe al borde de las lágrimas- Hai, Kobayashi-san... Descansaré un poco... Espero que con eso se controlen mis deseos de arrancarle esa ropa mundana y devorar su cuerpo a besos...

DÍA DE CELODonde viven las historias. Descúbrelo ahora