21| Pon Un ♥ Junto A Mi Nombre
3 de agosto 2017
No me dio tiempo de arrepentirme al decir lo que dije, quise retratarme en el último momento de mis palabras, pero él frente a mí y decir todo lo que ha dicho me ha dejado hipnotizada y sin palabras para responderle, no creo que sea posible encontrar las palabras adecuadas para este momento.
Entonces suena el timbre y recuerdo que había quedado con Ava, que íbamos a salir y de camino tomaría unas cuantas fotografías.
—Yo abro —dice Christopher y se da la vuelta para abrir la puerta.
Cierro los ojos y tomo un respiro, ¿qué rayos es esto? Froto las palmas de mis manos en mi rostro y miro justo donde están los platos, aún no hemos comido nada y por lo visto no es como si lo fuésemos a hacer.
—Llegué justo a tiempo —dice Ava entrando en la cocina—. Aún no he desayunado ¿Lo hiciste tú Chris?
—No, fue Lauren —responde.
—Mejor compro comida en el camino, no quiero morir envenenada —dice muy convencida de que la comida le caerá mal por venir de mí.
Ruedo los ojos y voy hasta la habitación a cambiarme. Duro aproximadamente quince minutos para estar lista y tener todo lo necesario, salgo de la habitación encontrándome con Ava conversando muy civilizadamente con su hermano, algo realmente extraño, en el poco tiempo que tengo aquí siempre terminan discutiendo o en no muy buenos términos. La veo despedirse con un beso en la mejilla de su hermano.
—Y tú, Lauren, ¿no te des pides con un beso? —inquiere sonriente y yo le ignoro buscando el ascensor.
—Hoy está de muy buen humor —dice Ava entrando tras de mí al ascensor—. Incluso bromeó contigo. Y no se quejó en absoluto de todo lo que le conté, supongo que no me prestó atención.
—Tal vez —opino—. No siempre se pondrá a discutir Ava, las cosas se dejan pasar.
Abro la puerta del auto que había tomado prestado, o que su amiga había dejado en sus manos, ya que visitaría a sus padres fuera del país.
—He conocido a alguien. —Se sonroja un poco—. No supe que decirle, puedes creerlo, yo siempre tengo respuestas para todo, pero cuando me invitó a salir me quedé muda.
—Pero sí respondiste ¿cierto?
—Casi estuvo a punto de arrepentirse, suerte a los cielos que pude hablar antes de que se diera la vuelta —sonríe—. Y me dio su número, aunque no sé si textearle, puede creer que estoy desesperada.
Me río de sus palabras.
—Al menos ponle un mensaje para que sepa que lo has agendado —respondo.
—No lo sé.
—Vale lo haré por ti —digo tomando su celular que estaba justo entre nosotras—. ¿Cómo se llama?
Marco la contraseña que me sé desde el primer día en que salimos juntas y entro a los mensajes de texto, Ava es muy sociable, creo que demasiado, así que no es muy difícil encontrarlo, ya que es el único contacto con quien no ha hablado.
—Steven —susurro cuando veo su nombre.
—Mierda, Lauren, no te atrevas. —Sonrío, porque yo sé muy bien que lo haré, a pesar de que mi hermana siempre fue mucho más extrovertida que yo por ciertas cosas, nunca me he detenido a la hora de hacer algo.
—Listo.
—¿Qué escribiste?
—Creo que fue un error que me dieras tu número, ahora no podré dejar de hablar contigo —contesto
—¡Qué? —grita y yo río porque obviamente no iba a escribir semejante cosa.
Me arrebata el celular de la mano aprovechando que ya hemos llegado y relaja el ceño cuando ve que no he puesto lo que he dicho.
—¡Oh Dios! ¡Ya respondió! —chilla.
Está vez soy yo la que arrebato el celular de su mano para ver su respuesta.
Aún no sé cómo debería agendar tu número.
Podrías añadir un corazón junto a mí nombre.
—Ahora qué respondo.
—No lo puedo creer, ¿tanto que hablas y no tienes palabras?
Salgo del auto, mientras ella teclea en su celular con una sonrisa en sus labios, al parecer ya encontró palabras para responder. Guarda el teléfono en su bolso y sale del auto para entrar junto conmigo a la cafetería para desayunar. Ubicamos una mesa no muy lejos de la entrada y hacemos nuestros pedidos.
—Ahora sonríes como tonta —le digo.
—Te buscaremos una pareja para que tú también sonrías como tonta —la camarera trae nuestros respectivos pedidos a la mesa—. ¿Por casualidad no te gusta mi hermano?
Aparto la mirada y me dispongo a probar lo que han puesto frente a mí.
—¡Oh por Dios! Te gusta.
—No —niego rápidamente.
—Claro que sí, si no te gustase no hubieras apartado la mirada justo cuando te pregunté, además eso explica porque los otros días estaban tan sonrojados dime se han besado —sonríe pareciendo muy entusiasta y no sé si decirle lo que ha pasado, que de cierta forma no es mucho, pero es algo.
—Puede —digo, porque sé que si me niego ella seguirá afirmando algo que en su manera sí es cierto.
—¿Besa bien? —pregunta—. Es más no quiero saber, es mi hermano, que asco.
Me río y seguimos conversando dejando atrás a Steven o algo con respecto a parejas y besos, hablamos de cualquier cosa en especial y luego damos un paseo para yo poder tomar fotos. Todo es muy fácil afuera y no hay nada en que pensar, pero encontrarme justo en el ascensor y saber que tras esas puertas me espera algo que desconozco me asusta, me asusta eso que pueda pasar entre Chris y yo. Me asusta sentirme ansiosa y deseosa de lo inesperado y me encuentro preguntándome en donde me he metido y como es que debo actuar para sobrevivir a esto que está surgiendo entre nosotros.
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Lila ✔️
RomanceElla hizo la promesa de que después de su viaje a San Francisco traería la felicidad con ella. Que superaría ese pasado que tanto la atormenta. Él se ofreció a ayudarla, pero nunca prometió que la ayudaría a afrontar su pasado, aunque sin darse cuen...