«12»

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»Narra:___«

Me iba muriendo de nervios por lo que mi jefe me iba a decir, no podía faltar un día si no fuera por algo irrelevante o importante, ¡Ah! Que mentira le puedo decir... no ahí de otra debo decirle la verdad.

Suspire rendida mientras me paraba un momento a esperar a Tom, quien se había quedado súper atrás por ver una tienda de bebidas, va debería dejarlo votado pero no quiero que le paso algo malo. Mire a mi alrededor y me di cuenta que a mi lado derecho había una tienda de mascotas, decidí entrar un momento para ver que clase de lindos animales habían en el lugar.

Habían muchos lindos cachorros, gatitos y ratoncitos, todos muy tierno, salí del lugar y note a Tom esperándome afuera, seguí caminando hasta llegar a un restaurante de pizza, si señores trabajo en una pizzería pero también venden otra cosas en la tarde, la pizza es en la noche.

Al llegar al lugar vi una que otras personas y me encamine hasta la parte de la cocina donde se que se encontraba mi jefe.

—¡Hola, Joel— salude a mi amigo de trabajo, quien me desvolvió el saludo, era un chico mas alto que yo de piel blanquecina, sus cabellos eran de un rojo intenso, jamas supe si es natural o tinte pero le queda bien y unos ojos azules, era lindo pero no me atraía casi lo veía mas como un hermano.

—¿Mm?— murmuro para verme y cambiar su expresión—¡____!— se acerco a mi mientras me daba un fuerte abrazo, solo sentía como el aire se me iba por su cariño que me asfixia.

— Jo-el... Me, asfixias— dije como pude, sintiendo como me soltaba lentamente y se disculpaba, no me molestaba casi que me demostrara cariño pero aveces que no me dejaba respirar por sus «Apapachos» como decía el.

Sentí un gruñido atrás de mi, cuando me acorde que no venia sola. Si señores había olvidado que Tom estaba conmigo ¡Y que mi jefe me puede matar en cualquier momento!

—¡Ah! Joel, regreso un momento.— rápidamente le hice una señal a Tom que esperara ahí y me fui como toda una Flash hacia mi jefe.

«Narrador Omnisciente»

—Que pesada— Se le escapaba de los labios al chico de cuencas mientras suspiraba y metía sus manos en sus bolsillos. No sabia bien pero el chico que tenia frente del no le caía bien.

—Y ¿Se le ofrece algo señor?— pregunto el joven pelirrojo mirando de mala gana al de cuencas, por alguna razón el chico de sudadera azul no le daba buena espina.

—¿Eh? No... nada.—respondió con la misma actitud que el de cabellos rojos, a decir verdad su forma de haberle hablado no le había agradado.— ¿Trabajas con ___?

—Si— afirmo distante.—¿Algún problema?

—No... ninguno.— lo primero que se le vino la mente fue un «TU» bien grande en su mente, pero lo dejo pasar. Cuando se dio la vuelta para esperar a la chica afuera cuando sintió que algo o alguien le susurro en el oído.

—Te acercas mas de lo debido de la pequeña ____, y te la veraz bien feo amigo— sintió como la respiración en su nuca se alejaba, si no fuera porque estuviera en un restaurante con varias persona el le hubiera roto esa horrible cara que tenia ahí mismo.

(•••)

—¡Ah, porque!— se quejaba la chica de ojos miel, mientras salia del despacho de su jefe.

—¿Que pasa pequeña?— preguntaba su amigo quien venia con una gran sonrisa hacia ella.

—Tengo que trabajar esta semana dos horas extra más.— lloriqueaba cómicamente por lo dicho, no quería trabajar mas de lo debido, pero no tenia de otra.

🍃¿Quien es ella Matt🍃                                            🌿Eddsworld🌿Donde viven las historias. Descúbrelo ahora