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– Entonces, eres nueva en la ciudad –Añadió Luke, si no recordaba mal su nombre.

– Si, me mudé hace una semana –Dije mientras comía algo de mi comida.

– Mierda –Dijo mirando detrás mío.

– Joder, Michael –Aviso Calum mirando al mismo lugar donde estaba mirando Luke.

– Cassie, te vemos en un rato, ¿sí? –Se despidió besando mi mejilla, y los demás hicieron lo mismo. Cosa que me dejó confundida y sonrojada.

– Irwin, Hood, Clifford, Hemmings... –Llego el chico grandulon de hace rato, me miró– ...¿Y tú eres?

– Cassie –Dije sonriendo.

– ¿Los conoces? –Me preguntó. Asentí.

– Hey, no te metas con ella –Luke vió las intenciones de este chico. Yo me hice a un lado lentamente alejándome de él.

– ¿Qué vas a hacer al respecto? –Sonrió campeón.

Luke se rascó la nuca sin saber que hacer. Miró la mesa, tomó mi hermoso pay y lo lanzó a su rostro. Mi boca se abrió.

– ¡Mi pay! –Dije mirando como ahora estaba todo embarrado en la cara de aquel chico. Y de pronto alguien grito "guerra de comida" y la comida estaba por todos lados.

– Cassie, será mejor que nos vayamos antes de que alguien te lance comi-

Sentí algo completamente asqueroso chocar contra mi rostro. En mi rostro se formó un puchero y escuche como los 4 chicos con los que estaba comenzaban a reír.

– ¡No sé rían! –Dije intentando sonar enojada, pero la risa me ganó.

Sus risas se volvieron más ruidosas cuando a Ashton le tiraron algo que parecía ser una hamburguesa. Ellos le lanzaban comida al grupo de amigos del grandulon, y al darse cuenta ellos de quién les lanzaban la comida se levantaron y caminaron hacía nosotros.

– Mierda, corre –Calum me sacó de mi trance tomando mi mano haciéndome correr junto con ellos 4. Podía escuchar sus risas mientras corrían.

La adrenalina corría por mi cuerpo, era asqueroso pero divertido. Después de correr durante mucho tiempo caminamos por los pasillos vacíos. Gracias a Jebus tenía horas libres, no quería saltarme clases. Todo el mundo estaba en clases, menos nosotros y pocas personas. Los pasillos estaban vacíos.

– Creo que tendrás que ducharte –Michael me miró riendo. Rodee los ojos e hice un puchero.

– No puedo ir a mi casa, tengo clase después de esta hora –Dije recargandome en el casillero de alguien. Estos chicos corrían mucho...

– Hay vestidores y regaderas aquí –Dijo Ashton mirándome de arriba a abajo. Su respiración era extraña.

– No tengo ropa extra –Hice una mueca mientras miraba al suelo.

– Yo tengo –Añadió Calum sonriendo.

Le sonreí y caminamos juntos hacía las regaderas de mujeres. Al llegar vimos un cártel colgado y mis ánimos cayeron al piso. Olía a queso. Era asqueroso. Mi primer día y olía a queso.

"Cerrado por mantenimiento".

Bufé.

– Entonces... –Michael dijo rendido mientras miraba su fleco tiernamente.

– Te puedes duchar en las de hombres –Sugirió Ashton–. A esta hora están vacías, cuidaremos la entrada para que nadie entre. Yo también tengo que ducharme.

Asentí no muy convencida y juntos caminamos a las regaderas. Me adentré con la ropa de Calum y yo y Ashton entramos a las regaderas. Nos metimos en regaderas separadas, gracias a Jebus había regaderas separadas porque en otras escuelas eran comunitarias o compartidas. Intentando no mirar el cuerpo de Ashton por qué es un completo dios, me bañé rápido. El olor a queso se esfumó y me sentía limpia. La ropa de Calum consistía en una playera sin mangas y unos skinny jeans negros. Me quedaban algo grandes, pero se veían bien. Salí junto con Ashton y los vi recargados en la pared riendo. Sonreí. Primer día y ya tenía amigos. Todo iba bien hasta ahora.

Losers Club «5sos»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora