-Zoe ¿Qué te pasa?- mi madre se acercó a mi.
Negué con la cabeza sin poder decir ni una sola palabra, solo escuche cuando el doctor se disculpó y salió de la habitación.
-¿Qué te dijo? ¿Qué pasa Zoe?
-Nada, enserio, solo me duele la cabeza, el doctor dijo que es normal- dije en susurro
En la noche mi madre se había puesto a ver el programa de cocina en la pequeña televisión, estaba acostada en el sofá con el ceño fruncido porque estaban dando comerciales.
Al verla imagine una parte de mi futuro, me echaría de la casa, iba a sufrir mucho sobre todo Ryan, esto es algo que no puedo ocultar por mas que quiera, al menos que me vaya, lejos.
Tragué en seco, soy una imbécil, ¿A dónde puedo ir yo? Y para colmo embarazada, era lo último que podía faltar.
Abortar, negué con la cabeza, jamás.
Darlo en adopción, tampoco, igual se darían cuenta.
Suspiré, no puedo hacer nada, solo necesitaba a Ryan ahora aunque no tenga nada que ver, estoy volviéndome loca y estoy entrando en la etapa de desesperación y esto no se siente bien.
-Mamá, ¿Puedes llamar a Ryan? Necesito hablar con el.
-Claro
Ella se paró del sofá y marcó el número en su teléfono y luego me lo paso, volvió al sofá concentrándose en el programa. El celular sonó un par de veces y luego escuche la dulce voz de Ryan.
-¿Ryan?
-¿Zoe? ¿Qué pasa? ¿Estas bien? ¿Quieres que valla? Ya estoy de camino, no te preocupes iré para allá, y estaré contigo, maldita sea te extraño y me estoy volviendo loco, ¿Ya bajo la alergia? ¿Qué te dij....
-Ryan....-lo interrumpí riendo, por eso lo quiero tanto, me alegra el día- Esta bien, estoy bien, solo te necesito conmigo, necesitamos hablar.
-Ya estoy en la esquina, Zoe espérame
-Esta bien- colgué- Mamá- ella me miró- Gracias, gracias por todo.
Ella sonrió dudosa- Eres mi hija, haría todo por ti.
Sonreí- Lo sé, eres la mejor.
La puerta fue tocada por varios golpes, que rápido era, mi madre se levantó y abrió la puerta, Ryan iba a decir algo pero mi madre lo interrumpió.
-Al fin, alguien vino, necesito ir al baño urgente y otro café.
Ryan la miro raro y confundido, cerró la puerta tras de el, se acercó a mi sonriendo y pegó sus labios con los míos, sonreí en sus labios y tomé su cabello entre mis manos.
-Tengo que decirte algo....-el pego su frente con la mis y rozo sus labios.
-¿Dime?
-Voy a ser mamá- murmure
Ryan se separó rápidamente y me observo confundido.
-¿Qué?-frunció el ceño
-Estoy embarazada
-Mierda
El llevo sus manos a su cabello y tiro de el, se sentó en el sofá, y movió su pierna derecha nerviosamente. mordí mis uñas.
-¿Estas segura?
-Si, Ryan ¿Qué voy hacer?- las lágrimas salieron otra vez, me siento arruinada.
-Que vamos hacer- me corrigió.
Ryan se acercó a mi, y me abrazo seco mis lágrimas con su pulgar.
