Parte Unica

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En un tiempo lejano, en una tierra que nadie recuerda, existió una chica llamada Mariana, una hermosa mujer de 20 años de edad, con un bello cabello color guinda hasta su cintura y unos bellos ojos del color del mar. Ella amaba las flores de su jardín, casi tanto como a sus pequeñas hermanas; Sophie de tan solo 17 años de edad, con unos grandes ojos de un morado tan oscuro como el anochecer, el cabello por debajo de sus hombros... y Ava con 14 años de edad, unos ojos curiosos de color rosa pastel y un cabello hasta sus hombros. Las 3 hermanas tenían algo que las distinguía del resto; sus pupilas. Ya que eran muy similares a las de un felino.

Cierto día las 3 hermanas daban un paseo por un bosque cerca a su pueblo , escuchando el canto de las hadas, mientras recogían frutas silvestres, se encontraron con Riss, un chico de 25 años,, cabello rojo como la sangre misma y unos ojos amables. Riss era amigo de la infancia de la mayor de las hermanas.

¡Hey!-. Saludo el pelirrojo.

¡Hey! ¿Qué hay de nuevo?-. Dijo la mayor de las hermanas.

¿No lo saben?-. Cuestiono el chico.

¿¡Que ha pasado!? -. Pregunto Ava con preocupación.

Encontraron a... creo eran... 4 mujeres y como 2 hombres despedazados en el pueblo-. Dijo el chico un tanto asustado.

...-. Las 3 hermanas guardaron silencio, pensativas.

¡C-co-como e-es e-es-eso p-pos-posi-posible!-. Tartamudeo Sophie aterrada.

¡N-no lo sé! ¡Esta mañana me levante y me entere de eso!-. Contesto Riss igual de aterrado.- S-será m-mejor q-que me s-sigan, d-debemos i-i-ir a-al p-pueblo-. Añadió más calmado.

Los 4 caminaron en silencio el trayecto hacia el pueblo, preguntándose cómo es que después de tantos años de paz ocurre esto y quien pudo hacerlo, sin llegar a alguna conclusión o culpable.

Al llegar al pueblo la gente comenzó a susurrar cosas sobre las 3 peculiares hermanas. "Son brujas" "Fueron ellas, estoy segura" "Tienen pactos con satanás", entre otras cosas. Ellos solo se limitaron a ir a la iglesia y rezar por las víctimas. Después de una hora y media de rezas, los 4 sintieron un fuerte golpe en la nuca y cayeron inconscientes.

Cuando las hermanas despertaron, se dieron cuenta que estaban atadas a un tronco para ser quemadas en la hoguera, cual bruja malvada.

¿P-por...que?-. Atino a decir Mariana.

¡MUERTE A LAS BRUJAS!-. Gritaron todos los habitantes del pueblo ignorando su pregunta.

~Esto no es posible~. Pensó Mariana ~Oh no, ¿¡TAMBIÉN SOPHIE Y AVA?!~ Noto y solo pudo gritar - ¡SON SOLO UNAS NIÑAS!-. Antes de que los habitantes tiraran las antorchas encendidas a la paja situada bajo los pies de las hermanas. Antes de morir, las hermanas oyeron a Riss gritar con tristeza y frustración, pero una de ellas vio una pequeña sonrisa en la multitud.

El paso de las semanas después de aquello se volvió tétrico para Riss, para la pueblo era aterrorizante puesto que la gente seguía desapareciendo y solo encontraban sus cadáveres, o algunos de ellos, al paso de 3 meses se escuchaba a una mujer gritar por las calles.

¡AYUDA! ¡AYUDA POR FAVOR!-. Dijo aquella mujer entre llantos -¡SE LLEVO A TOMMIE!

S-se lle-llevo a T-Tommie...?-. Pregunto Riss entre la tristeza y el pánico.

¡Se lo llevo anoche! ¡Esta mañana que desperté el ya no estaba!-. Respondió entre llantos la mujer.

Y-yo l-le a-ayu-do a bus-carlo-. Ofreció Riss

Riss y la mujer se adentraron al bosque a buscar al niño, pero una vez llegaron más profundo en el bosque, la mujer perdió la conciencia, no sin antes escuchar a Riss gritarle al agresor que se alejara preso del pánico.

Nada es lo que pareceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora