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capitulo 6: Ellos

Capitulo 6: Ellos

Ya habían pasado 2 días desde que anunciarán la boda de Yuuri y Alan, nadie sabía que el verdadero nombre del pelinegro era Viktor N eso causaría muchos problemas,
Sin contar que llamarían la atención innecesaria de la policía y marina.

Ahora mismo Viktor se había apoderado de esa casa, volviéndose el favorito de los padres de Yuuri, además de atraer la atención de todos los omegas de esa casa, algo que a Yuuri le molestaba no tanto porque sintiera celos, si no miedo a que el Alfa tomara a algún otro miembro de su familia como lo hizo con el, así que cada noche escapaba de su habitación e iba con el albino dejando que este se saciará con el, regresando cada mañana sin que lo notarán en su casa.

Esa mañana estaba más cansado de lo habitual porque el Alfa se encontraba muy caliente se lo había hecho 5 veces, a caso  ese tipo solo vivía de ron y sexo? Sus piernas temblaban, tenía muchas marcas por todo su cuerpo, ninguna visible aún sentía escurrir entre sus piernas sus fluidos, esa marca en su cuello hacían que él también se exitara mucho estando disponible para el mayor.

Se dejó caer en su cama para tratar de descansar antes de que su familia fuera a buscarlo, pero no tuvo suerte en ese momento entró su mamá

- hijo! Qué bueno que ya estás despierto, ayudame con el desayuno, después iremos a comprar tu ajuar de novio,  ver las invitaciones y flores, el salón donde será la recepción - se acercó al chico, pero Yuuri la esquivo caminando directo a su tocador fingiendo buscar algo - además  debemos buscar un estilista que arregle tu cabello, no debiste cortarlo - dejo salir un suspiro regresando a la puerta - apresurate! - salió, Yuuri dejo salir un suspiro, pero su madre regreso - eso me recuerda, si vas a escaparte en la noche para ver a tu prometido trata de regresar sin  apestar a Alfa -dejo salir una risa burlona mientras Yuuri se puso rojo - o divina juventud, lo bueno es que tienes ese collar, eso me recuerda al rato te lo quitó.

La mujer salió pero Yuuri dio un grito interno, como demonios esconderia la mordida! Empezó a correr en círculos y de dejó caer en su cama llorando.

-por que lloras - en la ventana estaba su prometido, comía una manzana roja, tenía una gran sonrisa.
- mi mamá verá la mordida - se sentó en la cama limpiando sus lagrimas, el Alfa entro en la habitación, y se sentó aún lado del joven mientras le acariciaba su negra cabellera - cuál es el problema? Tú y yo nos vamos a casar el fin de semana - el menor dejo salir un suspiro - no entiendes, voy a desonrar a mi familia si ven que me caso ya marcado y - se sonrojo el otro termino la frase - con la perilla usada?  - el moreno le dio un almohadazo - Viktor! No seas mal hablado

El Alfa río, pero no sé enojo - bueno trata de esconderlo hasta la tarde - le entrego la manzana, mientras que Yuuri comía de ella Viktor saco de entre sus ropas un frasco pequeño de color azul, tomo el contenido, el omega solo lo veía, hasta que Viktor lo tomo entre sus brazos besándolo lo atrajo más a su cuerpo acariciando su trasero, en ese momento sintió un líquido recorrer su garganta - cof... Cof.. que me diste? -
- solo es medicina - continuaba abrazando al Omega pero ahora por debajo de la ropa - para que no te quedes preñado - el menor todo rojo lo vió a los ojos, ya se imaginaba algo así, por un lado sabía que ese hombre no quería tener tener cachorros pero el si.

También se dio cuenta de algo, cómo sería su vida al lado de ese pirata, hasta ahora no había hablado de amor o cariño, sólo era sexo uno muy bueno pero nada más, bueno no todos se casaban por amor verdad? Y tenía suerte ese Alfa lo trataba bien, así que lo más seguro sería que terminaría siendo su sirviente y su Omega de diversión, no estaba tan mal, por lo menos para su familia sería un hombre feliz, y no una pena.

Viktor lo levanto de la cama, Yuuri dejó caer la manzana sabía lo que ese hombre quería, se arrodilló entre sus piernas y con cuidado bajo la cremallera del pantalón dejando salir el grueso pene del Alfa que ya estaba endureciendo, se inclinó y Comendo a  lamerlo, el macho lo sujeto de su cabellera negra para darle un ritmo - Yuuri, la chupas tan bien - dejo salir un gemido, pero esto no era suficiente para el, se levantó y empujó al chico contra el dosel de la cama levantó su kimono y lo penetró con mucha fuerza, el más bajito mordió su manga para no gritar, aún no estaba lubricado así que dolió las primeras embestidas pero con cada una de ellas Comenzó a sentir muy rico, ese hombre golpeaba su próstata, sin preguntarle metió su nudo dentro de él, dolía tanto como le gustaba.