One shots {hot}

La entrevista 🎬

Decían que una entrevista de trabajo era sencilla, menuda gente mas gilipollas, seguro que no contaban con que tu jefe fuese un sex-simbol, atlético y modelo. Que también viste como un dios y tiene cara de ángel.

Pues yo tenia todos estos pensamientos y un millón mas rondando por mi cabeza en el segundo de ver al que espero que sea mi próximo jefe.

-Buenos días usted debe ser _______- dios su voz, ronca, demasiado sexi.

-Emm si soy yo- digo levantándome de mi asiento y entregándole mi mano en forma de saludo.

-Pase por aquí por favor - al retirar su grandísima mano de la mía da media vuelta y se dirige al interior de su despacho -siéntese por favor- hago lo que me dice mientras él hace lo mismo pero en su butaca de jefe.

Después de hablar un poco sobre mi currículum empezamos a lanzarnos indirectas acabando, yo, en ropa interior entre sus brazos pegada a la pared.

Empieza a besar con agresividad mis labios dejando también mordidas por mi cuello y el valle de mis pechos, acompañando también peñizcos y azotes por mi culo y muslos.

En un movimiento rápido estoy tumbada en la mesa de la oficina con las piernas extendidas hacia arriba.

Con rapidez me quita/arranca el tanga, quedando liberada ante el. Sin esperas, mete un dedo en mi ya empapada entrepierna haciendo un movimiento circular y entrante y saliente. Añadiendo mas dedos acabé con tres saliendo y entrado rápidamente. Al estar demasiado preparada, introduce su miembro con lentitud, haciendo que yo sienta como me llena y el como mis paredes le aprietan.

Al estar todo dentro, empieza saliendo muy poco y entrando despacio, esperando a que mis paredes se acostumbrasen. Y así sintiendo como cada vez me abría mas, iba aumentando el ritmo, haciendo que la capa de sudor sobre nuestros cuerpos se hiciesen presentes. El ritmo iba aumentando y los dos sentíamos como el orgasmos se sentía cerca por lo que en un movimiento rápido me coloca en cuatro e introduce su polla en mi coño y su pulgar en mi ano haciendo que la parte delantera de mi cuerpo se desplome. Con el culo levantado las estocadas eran mas fuertes, lo que hacia mi cuerpo retumbar y que mis tetas rebotasen en la madera. El dedo cada vez se introducía mas, quedando dos dedos dentro mio. Las estocadas y los dedos se movían con ritmos opuestos, cuando uno entraba los otros salían haciendo una sensación mas placentera.

Cada vez que el miembro entraba de mi interior salían un poco de mis jugos, haciendo que al chocar nuestras pieles suene delicioso.

Cuando estaba a punto, empecé a gritar mas fuerte y a tensarme debido a las contracciones. Al correrme dejé que el miembro se introdujese con mayor facilidad, torturándome. Tampoco ayudaban los dedos que hacían movimientos circulares. El sufrimiento paró cuando me cogió con una mano la cadera y con otra el pelo para así correrse en mi columna vertebral dejándome toda esa zona calentita.