Capítulo 37

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Jhey

Me siento decepcionado, enojado, impotente, arrecho, triste, preocupado, estoy mal. Por todo, por Ashley, por el idiota que resultó ser nuestro hermano, por el mentiroso de mi padre y el engaño de mi supuesta madre, Karla, ¡Maldita sea!, lo que me dijo el tal Matthew me hizo abrir los ojos, no puedo enojarme así y dejar a Ashley sola en esto, recapacité, estaba metido en un estado de rabia, no sé, me descontrolé, ese chamo me hizo abrir los ojos y... Me cayó bien.

Ahora me preocupa Ashley, porque es tan porfiada que sé que no aceptará ayuda de nadie, ella misma querrá hacer las cosas solas, sé que podrá hacerlo, pero yo como su hermano mayor tengo que cuidarla pero me la pone difícil Dios.

_ ¿A dónde se fue Ashley?... En ese estado puede estar en cualquier parte, puede cometer una locura, ¿Dónde está, Jhey?, ¿Acaso no estas preocupado por lo que pueda pasarle?_ Me pregunta Matthew un poco angustiado, puedo ver preocupación en su rostro. Éste tipo tiene agallas, de la manera en que me enfrentó fue raro, porque nadie me levanta a mí la voz, pero gracias a que tuvo las bolas de hablarme así, yo entré en razón.

_No me preocupa ella en este momento, de dónde esté claro_ Le digo.

_ ¿Pero cómo no vas a estar preocupado?, eres su hermano... ¡Puta madre!_ Exclama, realmente está desesperado. Y puedo entenderlo, si está aquí, es porque realmente mi hermana le importa.

_Tengo rato llamándola y no me responde, ¿Ahora si estarás preocupado?_ Dice esta vez Tyler.

_Ashley está bien, no se preocupen_ Les digo.

_ ¿Cómo estas tan seguro?_ Preguntan los dos.

_Ella está con Austin_ Le respondo.

_ ¿Cómo sabes?_ Pregunta Matthew.

_ ¿Te llamó? ¿Te escribió? ¿Cómo te dijo? ¿En qué momento?_ Pregunta Tyler.

_No, no me avisó, sé que está con él, siempre que está mal va hasta donde él. Cuando se enoja conmigo o está deprimida, va hasta donde él y sé que ahorita está allá_ Le respondo.

_No me confío hasta oírlo de ella misma_ Dice Matthew.

_Bueno, bueno, ya basta_ Digo alto _Necesito pensar cómo voy hacer con Ashley, es tan porfiada que no aceptará mi dinero_

Todos se quedan mirándome por largos minutos. Luego los dirijo a una habitación a cada uno, no he visto a mis padres, seguro se fueron, no sé. Mañana veré que hago.

Ashley.

A la mañana siguiente, nos levantamos, desayunados, nos arreglamos, Austin tenia ropa mía ahí en su casa, así que me cambié, me coloqué unos short tiro alto, con una blusa deportiva y los mismo zapatos, me he hecho una coleta. Él se ha vestido también y en este momento estamos en su auto...

_ ¿Desde cuando tienes un carro?_ Le pregunto, pues él no tenía.

_Sabes que saqué mi licencia de conducir a mis 18 años, papá y mamá me regalaron este auto hace como tres semanas más o menos_ Me dice y arranca.

_Entiendo. Está lindo_

_Lo sé_ Me guiña el ojo.

_No sé qué haré cuando llegue, no quiero encontrarme con los mentirosos_ Le digo.

_Tranquila nena_

_En fin... Austin, no me has contado nada de ti, lo cual es raro, porque siempre hablas de ti y te conozco perfectamente para saber que cuando no hablas de ti, es porque algo ocultas, así que desembuchar_ Le digo.

¿Con quién me quedo? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora