_____ Pov
Token Black. El niño rico del pueblo, el único capaz de tener un maldito robot.
- Y es por eso que venimos a preguntarte si tenías un robot - dijo Kyle muy sonriente mientras gritos de personas, autos chocando, explosiones entre otras cosas se escuchaban de fondo.
Token ni siquiera respondió, solo cerró la puerta en nuestra cara. Aparté a Kyle de la entrada, y con todo el aire que mis pulmones soportaban grité.
- ¡Se que estás allí, pedazo de animal, no seas tan idiota y ayúdanos! - nada de nada - ¡Haré lo que quieras, imbécil! - Token salió finalmente de la casa.
- ¿Todo lo que quiera? - preguntó, simplemente asentí con la cabeza para responderle -Bien, síganme. Pero nunca vieron nada- dijo con voz firme.
Nos guió por su casa, maldita sea, esto era lo más grande que había visto en mi vida, no sabía que tan pobre era hasta ver todo esto. Nos llevó hasta su habitación, se dirigió hasta su armario donde apartó algunas de sus prendas, al parecer eso escondía un interruptor o más bien un escaner, puso su mano sobre este durante unos segundos y después se reveló frente a nuestros ojos una puerta.
Caminamos hasta esta, la cual nos llevaba a una escalera de caracol, y por cada escalera que bajaba les juro que estaba alucinando, estaba a pocos segundos de sacar mi teléfono y grabar todo esto, parecía un niño en una dulcería.
-Debería visitarte mas seguido- dije aún asombrada.
- Malditos ricos...- susurró Stan.
Al terminar de bajar llegamos a una sala enorme que me hacía recordar a Avengers, finalmente, al fondo de la sala, había nada más y nada menos que un robot, algo pequeño a comparación de Shi, pero ¡Vamos, era un maldito robot!
No pude evitar chillar de la emoción y abrazar a Token, dar pequeños saltitos y gritar "Gracias, gracias, gracias..." repetidas veces.
- Les explicaré como funciona, aunque... para su uso se necesitan cuatro personas... - dijo Token.
- ¿No nos ayudarás? - preguntó Kyle.
- ¡¿Estás loco?! - exclamó - Amo vivir, viejo- dijo, continuamente nos explicó su funcionamiento.
Con cada palabra no podía esconder mi emoción, aunque se necesitaban cuatro personas no podía negar que estaba apunto de entrar en un robot.- Y bien ¿Quién será el cuarto? - preguntó Token.
- Esperen, yo sé quién - respondí.
Saqué mi celular, sabía a quien iba a llamar y sabía como hacer que viniera lo más rápido posible.
- ¿Hola? - respondió.
- Hola, Butters, necesito tu ayuda, se que ya viste al robot gigante. Pues necesitamos tu ayuda para derribarlo- le dije, se escuchó un pequeño grito que provenía del cuarto de Butters de seguro.
- ¡Hamburguesas! Yo no podría hacer algo así. Yo... -
- El robot atrapó a Luke...- volví a hablar, interrumpiéndolo. Butters calló unos segundos, lo estaba pensando hasta que finalmente suspiró.
- ¡Salchichas, voy en seguida! - dijo muy nervioso.
A los pocos minutos ya estaba Butters junto a nosotros, Token le hizo un resumen de los controles del robot y al fin nos subimos a este. Cuando ya estábamos todos en posiciones Token presionó un botón lo que hizo que una plataforma levantara al robot, hasta llegar afuera de su casa, estábamos muy lejos de Shi, pero no podía retroceder ahora.
- ¡Bien, chicos, activen Voltron! - grité.
Con determinación los chicos y yo controlamos al robot, con torpeza obviamente, hasta llegar a metros de Shi.Debido al fuerte sonido que generaba el robot de Token Shi volteó instintivamente, tragué saliva, seguía sin creerme todo lo que estaba pasando.
Accioné el micrófono para hablarle a Shi, agarré aire pensando lo que iba a decirle, pero un fuerte gritó me interrumpió.
- ¡Shi! - gritó una pequeña niña.
- ¡¿Esa no es Karen?! - exclamó Stan.
- ¡¿La hermana de Kenny?! - grité. Nos quedamos callados para ver lo que estaba apunto de hacer.
Shi se agachó, le otorgó su mano para que subiera en ella, Karen lo hizo, ya arriba de este Shi llevó su mano hasta su cara para poder verla mejor.
- Shi, no debes hacer esto, estás destruyendo el pueblo ¿No recuerdas nuestra promesa? - ¡¿Es en serio lo que está pasando?! - prometiste protegerlo... prometiste protegerme, pero ahora solo estás destruyendo, asustando...- Oh, no, comenzó a llorar.
- ¿Puedes volver a ser lo que eras? Mi mejor amigo, mi... ¿príncipe azul? -Ah, diablos, ahora yo estoy llorando.El inmenso robot comenzó a brillar, veía como poco a poco se iba haciendo pequeño hasta que finalmente se convirtió en el Shi que todos amábamos. Suspiré con resignación, los chicos y yo nos bajamos del robot de Token. En serio tenía ganas de usar esa cosa.
Caminé despacio hasta Shi, Karen lo estaba abrazando, causando ternura ya que ella era más alta que él. Vi como Luke se iba levantando poco a poco, viendo a su alrededor, se le veía claramente que no tenía ni la menor idea de lo que estaba pasando.
- Shi...- dije finalmente, cortando su escena con Karen, él me vio muy sorprendido, sus ojos se humedecieron hasta que comenzó a llorar, corrió hasta a mí.
Le di un gran abrazo - Lo siento tanto- lloró en mi hombro.
- Descuida, hay tantas cosas que debo decirte...- le dije, segundos después llegó Luke y se sentó junto a nosotros, no me había dado cuenta que estábamos en el suelo.
- Así que... Nuestra idea de que nadie debía enterarse que era Shi se fue al carajo...- dijo Luke, los tres nos comenzamos a reír.
No paró allí, todos parecían actuar con normalidad, empezaron a hacer lo que estaban haciendo antes de que esto comenzará. Esta ciudad no dejara de sorprenderme.
- ¿Qué tal si vamos a casa? Mamá querrá verte - dije levantándome.
- ¿Me seguirán queriendo a pesar de lo que hice? - nos preguntó con lágrimas amenazando salir en cualquier momento.
-Pequeño - dijo Luke, cargando a Shi - ellos nunca nos dejarán de querer, ni ahora ni nunca. ¿Qué tal si mejor me explicas como hiciste eso?-
Shi nos explicó todo, al parecer su poder despertó gracias a la rabia que sentía. Y quien diría que este fue el fin de esta caótica aventura.
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The lost twins (South park y tu)
Fiksi Penggemar¿Alguna vez has sentido el deseo de desaparecer de este mundo? ¿Dejar todo y salir corriendo? ¿Sentir la culpa de las tragedias de los demás? ¿Te has sentido como una basura? ¿Cómo si no merecieras vivir? Yo sé que sí, no te engañes más. ¿Qué quién...