Aqui me encuentro escribiendo con una pluma vieja, sobre una hoja suelta apoyada en un libro de Vincent Van Gogh que no termine de leer.
El arte me duele, me lastima, me consume. Estoy sumergida en él pero sin respetar su perfeccion.
Por que veo hipocritas pintar y creerse superior al resto, por que eh visto ojos llenos de frustración y tristeza destrozar un lienzo
Que nos llaman irresponsables para justificar la falta de empeño, pero ya es hora de que entiendan de una puta vez de que son muy afortunados al dar dos pasos y no ahogarse, al hacer una pincelada y que la inseguridad no los lleve a abandonar el cuadro.
Hay personas capaces de superarse y otras por ejemplo escribimos de como se superan los demas.
Por que? El panico al fracaso, el horror de no poder lograr nada.
El arte me duele, me encierra, no respiro.
Dijeron que era libertad pero lo unico que hace es hacerme reconocer que dia a dia estoy mas sola que ayer.
El arte rompio mi corazón y me encerro en ese frivolo monumento de telarañas sobre un marco mal tallado, en donde ya no tendria que pintar para expresar sentimientos sino mas bien para encontrarlos.
Y aunque intentase siempre estara demasiado redondo, demasiado plano, muy mal fugado. Siempre estara tan apto a tu realidad y eso esta mal.
"Crezcan" nos dijeron, pero las letras pequeñas aclaraban "pisoteando a otros, no sean ciegos"
Pero como iba a poder mirar si yo misma fui quien alimento los cuervos para que me comieran los ojos y asi no ver un mundo tan cruel, tan atroz, un mundo en donde lo único que rige a las personas es el fariseismo.
Consejo? No patees la pelota tan fuerte contra la pared.
Lo se, no soy una persona de buena letra, seria un eufemismo decir eso, a lo que quiero llegar es que estorbamos.
Ya no somos personas sino circunstancias.
Que si lo haces bien eres envidiado, y si lo haces mal no recibes una mierda de apoyo por que estas en el lugar perfecto para ellos.
Que no, no merecemos menos por no tener una clasificacion de 10
Que no merecemos todo esto, no merecemos el sabor amargo en nuestros dias pintando con angustia en nuestras manos.
Que no...
