¿Y si te digo que me enamoré de ti?

Capítulo XXXVI

El viernes en la escuela ya todos hablaban de lo que había sucedido con Ángela, incluso algunos me volteaban a ver raro, como si yo tuviera algo que ver con todo eso... Aunque si lo tenía no era para que lo hicieran.
Y como casi siempre pasaba, Christian estaba enaltecido, pues había salido con la chica más linda de la preparatoria, y no solo eso, había terminado con su buena reputación.
Y eso para él era un gran premió, quitarle algo a alguien, los hacía sentir tan bien que me daban pena. Todo era estúpido.

Charly se quedó en el hospital, pues a Ángela la darían de alta por la tarde, y su hermano no la quería dejarla sola. Así que tomé apuntes para Charly, de todas las clases y lo más que podía explicar y entender al mismo tiempo, no fue fácil pero estaba segura que cualquier cosa ayudaría a Charly por no estar en clase.
Esa era la ventaja de estar en las mismas clases, ahora le dábamos las gracias al sistema por haber fallado en ese momento, pues nos había traído una ventaja más de las muchas que teníamos en lista.

Después de clases no me moleste en ir a casa, ni siquiera llamé, pues mamá y papá sabían que esa tarde no llegaría casa hasta la noche, después de que terminara de trabajar.
Fui directamente a la casa de Charly después de salir de clases, pues el tiempo era recortado y no podía quedarme mucho tiempo como en ocaciones anteriores.

Papá y mamá habían terminado aceptando que yo visitará a los Nerron después de que platicara con ellos al llegar al hospital, les expliqué en repetidas ocasiones que ellos no eran malas personas, y que no eran una mala influencia para mí. Simplemente, y como a cualquiera le pudiera pasar, los hijos Nerron habían caído en las drogas, pero a pesar de todo eso habían logrado salir adelante durante los últimos meses, y está era una recaída, aunque también les dije que yo tenía esperanza u confiaba que Ángela saldría de esta y triunfaria.
Mi papá me dijo que me comprendía, mamá no dijo nada, solo hacia gestos con la boca en signo de que compartía mi idea, aunque no quería aceptarlo.
Y en ese mismo instante, cuando dijeron el si definitivo, les pedí el permiso para visitar a los Nerron al día siguiente.

Toque el timbre de la casa,n no tardarían mucho pues a Ángela la habían dado de alta a las 3:00 de la tarde, seguramente estaban en su habitación.
Se escucharon unos pasos caminar hacia la puerta lentamente. Charly la abrió.

--Hola Jade. Pasa.--él sonrió ligeramente.
--Hola Charly.
--¿Cómo te ha ido en la jaula de los animales salvajes?.--dijo Charly ya estando en la sala.
--Pues… normal… Lo único que está mal es que ya están hablando de... Ángela.
--Lo sé… Los vecinos le han dicho cosas a mis padres.--Charly agachó la cabeza.
--Son unos idiotas... Al estúpido de Christian lo tienen en el trono por lo que hizo, nadie mira el lado malo de las cosas...
--Ya lo sé también. Es una tristeza que pase esto, que un chico quedé bien por haber hecho eso con una chica... Son unos ignorantes.
--La verdad que sí está muy mal que lo hagan... Lo siento mucho Charly.
--No te preocupes Jade. Ya sé cómo es vivir con eso… Lo vamos a superar. --Charly hizo una pausa.--Ángela esta en su habitación, está despierta.
--¿Puedo subir?.-- pregunté al ver que Charly se dirigía a las escaleras.
--Por supuesto que sí Jade. Ven.

Charly y yo subimos las escaleras.
Y una vibra extraña se vivía entre nosotros dos.
Las cosas habían cambiado, de eso no había duda, pero habían cambiado para bien.
Ahora los dos lo haríamos todo bien, empezaríamos poco a poco, y estando seguros de lo que queríamos y lo que no.

De la habitación de Ángela se escuchaba un murmullo, tan bajo que se podía confundir con la televisión, seguramente sus padres estarían ahí con ellas.

Al entrar a la habitación los padres de Ángela me saludaron, no sin antes que la señora Susana me diera un largo y apretado abrazo, y que él señor Nerron me diera un gran apretón de manos.