Un omega diferente

Capitulo 4.

Ya había pasado un día entero y el estúpido de Ian no se dignaba en enviarle un mensaje a Derek. El pobre no pudo pegar el ojo en toda la noche por culpa de la angustia y frustración que sentía por no saber nada de su pequeño omega.

— MALDITO MALNACIDO…— gritaba por toda su casa, era realmente raro ver al gran Alfa alterado por culpa de una persona ya que a él no le solían importar mucho estas. — ¡¡Contestaaá!!— Volvía a gritar enojado.

Pero en ese preciso momento el pitido que suena cuando estas llamando a alguien se detuvo y escucho un “Hola” del otro lado de la línea, por fin pudo sentir paz ahora podría saber que Le ocurrió al pequeño.

— ¡¡PARA QUE MIERDA TIENES UN CELULAR SI NO CONTESTAS TUS LAMADAS!!— gritaba a todo pulmón dejando sordo al pobre moreno que se encontraba del otro lado de la línea.

— Lo siento lo estuve cuidando toda la noche y no tenía tiempo de llamarte. — La verdad era que prefería solucionar estos temas cara a cara y no atreves de un teléfono por esta razón no había contestado ninguna de sus llamadas.

— Está bien…digamos que te creo, ¿Cómo se encuentra?— soltaba un leve rugido por las palabras de Ian, pensar que el moreno paso toda la noche con el pequeño mientras él se moría de la angustia solo en esa enorme casa lo hizo sentir peor de lo que ya estaba.

— Se encuentra bien…todavía tiene un poco de temperatura pero está sobreviviendo. — El mayor  al escuchar la primera frase sintió alivio y dejo salir un gran suspiro mientras se tiraba a su sofá exhausto. — Oye puedes abrirme la puerta. —

Justo cuando el peli negro termino de decir esa frase el timbre de su casa sonó fuerte mente causándole jaqueca a Derek. <<Este imbécil>> Se levantó de mala gana y dio pequeños pasos arrastrando sus pies por todo el recorrido hasta  llegar a la puerta, y ahí soltó otra maldición y la abrió dejando ver al sonriente Ian del otro lado todavía con el teléfono en la oreja.

Este entro sin más a la casa causándole molestar al mayor, no es que Derek odie o le moleste todo sobre Ian pero como no había pegado el ojo en toda la noche se sentía realmente irritado y todas las cosas le molestaba de gran manera. Envidiaba la gran sonrisa del menor y deseaba que este se la tragara. <<como se atreve a presumirme su sonrisa…Ya sé que dormiste de maravilla no necesito comprobarlo>> Pensó con enojo.

— Veo que estuviste ocupado anoche. — dijo Ian al ver la isla del comedor replete de botellas vacías y colillas de cigarrillo  tiradas por doquier.  La casa del mayor se encontraba hecha un desastre lo cual le intrigo al menor de los Alfas.

— Todo es tu culpa si me hubieras contestado las llamadas no estaría así.— Se señaló completo, el vistiendo pijama a las 4 de la tarde era raro y más un día de semana haciéndolo ver como un desempleado sin futuro.  

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Se dirigieron al taller que tenía en el garaje y decidieron hablar ahí ya que era más cómodo para el mayor. Al llegar este se dispuso a terminar sus tareas y tratar de limpiar un poco mientras tenía una charla nada agradable con el menor.

— Y dime ¿Por qué te pusiste así en ese momento?— Pregunto Ian mientras ayudaba a recoger un par de cosas que se encontraban tiradas en el suelo.

 Por lo visto ayer después de irse con Joshua totalmente inconsciente Derek se irrito tanto a tal punto de tirar y patear las cosas que se encontraban en su taller, dejando este todo hecho un desastre.

—¿No lo sabes?— Soltó sorprendido, él creía que el pequeño omega le había contado todo a su mejor amigo. —…bueno…tu tampoco sabias que era un omega...— Dijo dubitativamente mientras se rascaba la parte de atrás de la cabeza.