Todo lo que recibia en la escuela eran burlas incesantes para mi ya era una costumbre, habia comenzado hace algunos años cuando aquel a quien consideraba mi mejor amigo descubrio que era gay y decidio contarle a todo el mundo mi secreto, desde entonces siempre me miraban mal o hacian comentarios molestos al respecto, pero lo peor de todo fue cuando mis padres se enteraron pues se culparon de mi condicion y se sumergieron en la bebida, era horrible estar en la escuela y mas aun el llegar a casa para descubrir a mis progenitores ahogando sus penas en alcohol, todo este tiempo lo habia soportado bien pero ya no podia continuar asi, llegue a casa y me desahogue en la almohada hasta caer dormido, incluso en mis sueños seguia llorando y completamente solo cuando de repente siento una mano sobre mi hombro seguido de la mas hermosa de las voces que jamas haya escuchado.
...: Por favor, ya no llores, eres demaciado bello para eso.
Levante mi rostro hacia ese desconocido solo para emcontrarme con un par de ojos color ambar los cuales me miraban con ternura, sin embargo eso no era todo, me dedicaba una calida sonrisa la cual en ese instante logro calmar mis penas y tormentos.
...: (ofreciendome gentilmente su mano) Mi nombre es Des Aeva, mucho gusto Leo Splinder
Tome su mano para incorporarme y un sinfin de petalos de magnolias volaron a mi alrededor cambiando mi atuendo sucio y fachoso por uno un poco mas elegante pero a la vez simple y comodo, apesar de que detesto la ropa elegante lo agradeci ya que al observar mas atentamente a Des me percate de que el lucia un magnifico traje negro el cual resaltaba su palida piel, era sumamente alto y delgado con un mechon rubio en su cabello negro, parecia un principe de los cuentos de hadas, en cambio yo solo era un tipo cualquiera, piel morena, ojos verdes y el tatuaje en mi espalda con la leyenda alis aquilae, almenos ahora lucia un poco mas acorde a este principe.
Leo: (sin pensar en lo que decia) Eres hermoso.
Me senti avergonzado por lo que dije, sin embargo para mi sorpresa el se sonrojo y tomo mi mano.
Des: No tanto como tu, ahora sigueme.
Yo lo obedeci, corrimos tomados de la mano entre un campo de magnolias que hizo aparecer al chasquear los dedos, cuando finalmente nos detuvimos habia una hermosa puerta de madera en medio del campo, sobre ella habia un cristal redondo que tenia el mismo diseño que mi espalda, despues de darle un vistazo dirigi mi vista hacia mi acompañante y el tomo mi rostro entre sus manos.
Des: Nuestro tiempo por hoy se ha terminado es momento de que despiertes.
Leo: No quiero, quiero quedarme junto a ti un poco mas.
Des: Debes hacerlo.
Leo: Pero...
Des: No tengas miedo, estare esperandote la proxima vez que vuelvas a dormir.
Leo: ¿Lo prometes?
Des: (poniendo una mano en su pecho) Lo prometo.
La puerta se abrio y yo comenze a acercarme lentamente, decidi darle un ultimo vistazo y el se despidio con la mano, antes de que la puerta se cerrara por si sola me dedico nuevamente esa hermosa sonrisa suya, desperte muy exaltado y confundido, sentia un cosquilleo en mi estomago, decidi ignorarlo y regresar a mi tediosa rutina pero fue imposible todo el dia me la pase pensando en Des tanto asi que sin darme cuenta me encontraba nuevamente en casa y aunque todavia no desaparecia esa sensacion de cosquilleo estaba esperanzado de que las palabras de Des fueran ciertas, me acoste en la cama y cerre mis ojos, no se en que momento fui llamado finalmente por morfeo pero me encontraba sentado en una banca, cuando senti un sutil aroma a canela y vainilla, voltee y ahi estaba Des tan perfecto como lo recordaba, no, lucia aun mas perfecto ese bello principe el cual tomo unos mechones de mi cabello acomodandolos con un broche en forma de estrella y me sonrio, sonrisa la cual correspondi, al igual que el dia anterior tomo mi mano y me guio a travez del campo de magnolias, nuevamente llegamos ante la puerta me miro y supe que era momento de despertar, me encamine hacia ella pero antes de cruzar decidi admirarlo una ultima vez, lucia tan hermoso, yo era una triste persona vagando bajo la obscuridad del cielo al que las nuves ocultaron las estrellas y el era la imponente luna que aluzaba mi camino.
Des: Te equivocas, Mr. Blue.
Leo: ¿A que te refieres Des?
Des: La luna por si sola es incapaz de aluzar pues en el momento en que el la estrella del amanecer no esta para ella pierde su luz, depende del brillo de su estrella.
Leo: Sigo sin entender...
Des: (poniendo su mano en mi mejilla) Me refiero a que al igual que la luna yo solo puedo "brillar" si tengo a mi estrella, tu piensas que al ser tu luna tengo luz propia para iluminar tu camino, cuando en realidad solo reflejo la luz de mi estrella, su luz, TU luz.
No sabia que contestar, acaso Des me decia que yo era su estrella, que el reflejaba la luz que desprendia, sin darme cuenta esboze una sonrisa para el mientras la puerta se cerraba.
Desperte muy feliz y con ese extraño cosquilleo al pensar en Des, al igual que ayer ocupo mi mente durante todo el dia que para mi paso volando, nadie en todo el dia pudo quitarme la sonrisa que mi principe en sueños provoco, llegue a casa y lo primero que hice fue entrar a mi alcoba, tumbarme en la cama y dormir, esta vez disfrutamos juntos un helado mientras nos haciamos bromas; esa se convirtio en mi nueva rutina todos los dias al llegar de la escuela me dirigia inmediatamente a la cama para disfrutar junto a Des, en una ocasion incluso celebramos un baile, compartir junto a mi hombre luna fue lo mejor, tanto asi que las despedidas se volvieron menos deprimentes para mi, comenze a arreglarme un poco mas para ir a la escuela y los comentarios a mi alrededor ya no me fastidiaban, incluso mis notas mejoraron, ahora la vida no me parecia una mierda, sin embargo por alguna razon a quien no le basto con haberle contado a todos mi secreto ahora le molestaba mi nueva actitud por lo que un dia despues de clases reunio a los matones de la escuela y me atacaron en un 8 contra 1, naturalmente yo me defendi y logre dejar inconsiente a 3 de ellos antes de que Armando lograra sacar unos nudillos de laton los cuales utilizo para darme una golpiza mientras los otros 4 me sujetaban, cuando finalmente se cansaron yo me dirigi a casa, necesitaba ir con Des pero por mas que lo intente no podia dormir, finalmente opte por salir de la cama y despues de comprobar que mis padres ya se encontraran ebrios me dirigi al baño, busque en el botiquin hasta que encontre el frasco de pastillas para dormir, sostuve por un momento la brillante pildora roja en mi mano antes de tomarla, funciono de maravilla, esa noche volee junto a Des en el lomo de un aguila y esta vez fue mayor el tiempo que pase junto a mi principe; despues de eso comenze a tomar las pastillas cada que podia, ver a Des era lo que me hacia mas feliz en todo el mundo y gracias a las pildoras podia verlo mas de una vez al dia, lo malo fue que por mi descuido dormi en clase con la mochila abierta, entonces la profesora encontro el frasco que torpemente comenze a cargar, decidio que lo mejor era comunicarles a mis padres la situacion, al principio parecia que lo tomaron muy bien, pero una vez nos quedamos solos fue cuando todo se descontrolo, ellos habian estado bebiendo poco antes de la noticia por lo que a estas alturas se encontraban freneticos, exigieron una explicasion pero antes siquiera de abrir la boca mi madre surco mi cara de lado a lado con una bofetada, mi padre no se quedo atras e imito su ejemplo, luego de unas interminables horas de regaños y reclamos se deshicieron de todos los medicamentos para dormir y me encerraron en mi habitacion, no pude volver a dormir, pase 4 noches en vela intenando conciliar el sueño, fueron los cuatro dias mas horribles de toda mi vida, extrañaba a mi hermoso Des, todos mis pensamientos eran dedicados a el, finalmente me permitieron volver a la escuela pero yo me sentia muerto en vida, sin mi principe mis dias ya no tenian color, nadie entendia que al quitarme esas pastillas me quitaron lo unico que me hacia feliz por lo que al salir de la escuela rapidamente compre en la farmacia otro frasco y sin demora alguna me encerre en mi habitacion, sabia que si alguien lo encontraba volverian a separarme de Des y eso era algo que no podia permitir, lentamente abri el frasco y contemple su contenido, algo en mi gritaba que no lo hiciera, que existian otras soluciones pero decidi ignorarlo, vacie totalmente la pequeña botella y felizmente me sumi en la inconsiencia.
Ahi estaba, ese campo de magnolias en el que por primera vez fui feliz junto a Des y en medio se encontraba el, mi adorado principe, corri hacia el para refugiarme en sus calidos brazos pero el me apreto de lo hombros y me hizo girar hacia la puerta.
Des: (con lagrimas en los ojos) ¿Que has hecho?, ¿Por que lo hiciste?
Yo en un principio lo mire confundido pero de repente la puerta se cuarteo, grandes grietas surgieron de ella para finalmente romperse en pequeños pedacitos, incredulo mire la puerta durante un momento para despues dirigir mi vista a Des, yo me encontraba sumamente feliz, ahora podre estar para siempre con mi principe, sin embargo por alguna razon el se encontraba muy angustiado.
Leo: Ahora estaremos juntos por siempre (le dije muy emocionado)
Pero nunca imagine lo que sucederia acontinuacion.
Des: (dandome el mas tierno beso que jamas haya tenido) ¿Aun no lo entiendes Leo?
Fue su pregunta al apartarse de mi, yo estaba confundido y solo observaba como gruesas lagrimas caian de sus hermosos ojos ambar, de repente mi amado principe se alejo y de su cuerpo comenzo a emanar una extraña energia oscura, preocupado intente acercarme a el pero mi cuerpo no respondia.
Leo: ¿Des?, ¿Que te sucede?
Fue lo que le pregunte muy angustiado pero esa energia oscura comenzo a envolverlo, presenciaba ante mis ojos como mi amado se transformaba, de su bello rostro aparecieron unas marcas oscuras en sus mejillas, sus hermosas manos blancas se transformaron en grandes garras negras y sus bellos ojos ambar se tornaron por un segundo rojos como la sangre, junto a el aparecio una hoz casi tan alta como el, poseia un craneo de donde surgia la hoja y en ella se podian apreciar las palabras Memento Mori.
Lo admito, me asuste un poco y de mis ojos brotaron las lagrimas, Des extendio una mano hacia mi yo me quede estatico en mi lugar y el coloco sobre mi pelo nuevamente un broche en forma de estrella, pude observar como lloraba pero estas lagrimas eran diferentes, era de color negro y dejaban a su paso las marcas del recorrido por las mejillas de mi principe.
Des: Esto no es lo que queria, jamas devio pasar, ¿Porque lo hiciste?, (pregunto en un susurro).
Leo: Por que te amo Des, mi hombre luna.
Fue mi contestacion antes de arrojarme a sus brazos.
Des: Y yo a ti Leo, mi hombre estrella.
Esa fue su contestacion antes de corresponder a mi abrazo, el ultimo abrazo.
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Hola a tod@s, aqui les traigo esta pequeña historia, primero que nada quiero aclarar que los personajes no me pertenecen son una creacion de Snipster, segundo la historia no es de mi invension esta basada en el video del principio y no se quien es el autor o autora pero tambien merece parte del credito, espero que les haya gustado el como lo adapte, quisiera invitarlos a leer mis otras historias:
AMOLAD El cambio de muerte
El aniversario
Asi como la historia en conjunto con YaryNeko_Kuro3 la cual pueden encontrar en su perfil:
El regreso de una plaga y un angel
Bueno, de mi parte eso es todo saludos desde Mexico♡.
