Finn y Dylan fueron a la casa de Haden, interrumpiendo su día de lectura, para liberar de alguna manera a Haden de su casa, siguiendo el plan que él les había planteado.
Cuando la señora Harris les abrió la puerta y vio a Finn le dedicó una sonrisa amistosa y lo invitó a pasar. Pero cuando vio a Dylan que apareció al lado de Finn, le cambió la expresión totalmente, de amigable a enojada y despreciativa. Una de las peores características de la mamá de Haden era su cambio de ánimo repentino o mejor dicho su bipolaridad, que a veces llegaba a dar miedo.
Se quedó mirando a Dylan de pies a cabeza como si fuera alguien desconocido, como si fuera un bicho feo. Su mano que estaba posada en la puerta bajó recorriendo la madera hasta encontrar la perilla. Se aferró tan fuerte a la manilla de la puerta que se le pusieron los nudillos blancos, como si no estuviera decidida, si dejarlos pasar o si cerrarles la puerta en la cara y fracturarles las narices.
Antes de que la señora Harris se pudiera decidir, apareció Hayden, el hermano mayor de Haden, por detrás de ella. Tenía la boca manchada con mermelada y hablaba con la boca llena mientras le preguntaba a su mamá por si quedaba más tarta de chocolate, tenía los lentes torcidos y manchados al igual que sus dedos. Estaba mucho más gordo que antes de que se fuera de la casa. Finn se acordaba del hermano del, en ese entonces, pequeño Haden que le pegaba y lo maltrataba sin que nadie supiera excepto las personas a quien Haden les contaba (como a Finn). Se acordaba que después, cuando se fue de la casa, ya era un joven maduro, decidido a estudiar y a tener un buen futuro. Y ahora veía de nuevo al Hayden inmaduro, comilón, gordo y molestoso pero inteligente.
Finn West ― dijo Hayden cuando reparó en Finn parado frente a la puerta, lo menos amistoso y empático posible.
Hayden Harris ― saludó Finn mostrando el tono más ignorante que encontró en sus cuerdas vocales.
La tensión se sentía en el aire, incluso Dylan, que no había hablado, le lanzaba una cara asesina, llena de odio, a la mamá de los hermanos Harris.
Los Harris: ¿cómo describirlos? Eran todos distintos. El señor Harris, Henry Harris, un diseñador gráfico amante de la astronomía, es el mejor acompañante para momentos tristes, con sus chistes todo se mejora; La señora Harris, Hazel Harris, bipolaridad extrema, nunca demuestra satisfacción ni amor pero se nota en sus ojos el temor de perder a su hijo; Hayden Harris, alguien que algún día fue estudioso con un futuro asegurado; Haden Harris, un chico tímido y débil pero inteligente, amable, buen amigo... y sobran las características buenas para definirlo; Holland Harris, la hija menor, que solo tiene algunos meses; y los mellizos que se iban a llamar Hallie y Hakeem Harris pero murieron antes de nacer. La familia de los HH7 (como les decían porque todos tenían un nombre con H más el apellido con H, y aunque eran solo 5 alguna vez pudieron ser 7) habían pasado por momentos difíciles, perdieron a dos hijos, los mellizos, y ahora perderían a otro. Debe doler que tu hijo no quiera pasar tiempo contigo antes de morir pero si en verdad lo quieren deberían dejar que sea feliz mientras pueda.
Finalmente la señora Hazel los dejó pasar y llamó a Haden, su plan había funcionado bien hasta ahora, pasar sobre la mamá osa era la parte más complicada.
Se sentaron en el living solo unos segundos hasta que Haden atravesó la puerta de su habitación y los invitó a pasar. Se sentaron los 3 en la cama de Haden, era pequeña asi que, sentados en posición india, todos se tocaban las rodillas entre sí.
―Bien Haden, ¿y cuál es el plan? ― preguntó Finn.
―Haden miró a Dylan que tenía la cabeza gacha.
―¿Dylan? ― preguntó él.
―¿Sí? ― respondió levantando la cabeza.
―¿Cuál es el plan? ― preguntó Haden arqueando las cejas.
―¿Pensé que tú tenías un plan?
―Bueno... tu eres la mente maestra de este grupo Dylan ― completó Finn
―Em...yo creo que... deberíamos hablar con tus papás ― planteó Dylan vacilando y era la primera vez que no la veía segura de sí misma.
―¡¿Hablar?! ― preguntaron Finn y Haden al unísono.
Finn conocía muy bien a los HH7 y sabía perfectamente que, exceptuando al papá de Haden, a ellos no les gustaba dialogar pero tal vez Dylan no sabía eso.
―¡Sí!, hablar ― dijo Dylan arqueando las cejas ante la cara expectante de Finn y Haden ― ¡y no me miren con esas caras! ― agregó ― deberías decirle a tus papás que no puedes pasar todo el tiempo con ellos pero que intentarás verlos más a menudo...
―¡Pero yo no quiero pasar tiempo con ellos! ― la interrumpió Haden con tono fuerte. Y cuando esas palabras fueron pronunciadas se escuchó un sollozo del otro lado de la puerta, seguramente de la mamá de Haden quien estaba espiando por la puerta con Hayden.
Hubo silencio por algunos segundos hasta que Dylan levantó la mirada y dijo:
―Haden, se nota en los ojos de tu madre que de verdad le duele perderte, ella te quiere y te quiere con ella ― dijo Dylan con un tono suave y persuasivo. Era difícil poder hablar o interrumpir mientras ella utilizaba ese tono, era difícil retenerse de escucharlo y disfrutarlo ― y debe ser doloroso que tu hijo no quiera pasar tiempo contigo ― continuó ― sé que tu también la quieres y la decisión es tuya pero también tienes que pensar en los demás, Haden.
―Haden no vaciló, se le pusieron los ojos llorosos y la cara roja. No dijo palabra y se levantó de la cama, atravesó la puerta y la cerró con fuerza, dejando a Finn y a Dylan adentro.
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Antes de morir
Teen Fiction"Puedes soñar todo lo que quieras, pero la vida es corta, intenta soñar despierto y hazlo" Haden Harris es un chico de 16 años que sufre de una enfermedad terminal. Pero junto a sus amigos se internara en una divertida historia contra reloj dond...