Mi vida nunca a sido la mejor, he tenido muchos desengaños y la verdad que he sufrido bastante, pero como siempre aparento estar bien, la gente no lo nota.
Perdón olvido presentarme mi nombre es Marta tengo dieciséis años y soy la pequeña de tres hermanos. Mi madre se llama Sara y me tiene bastante consentida, algo que es normal debido a que soy la única que le hace un poquito de caso... Hace poco discutí con ella porque se piensa que sigo siendo la niña a la que le hacía coletitas, le elegía la ropa, le ponía lazos y jugaba con muñecas.
Yo ya no soy así tengo diferentes gustos, me pone de mal humor que algo que me guste a mí a mi madre no y me diga que me queda mal o que me lo quite. Debe darse cuenta de que "su niñita" ya tiene dieciséis años y no la va a estar manipulando como si tuviera cinco años. Soy su hija y evidentemente la quiero muchísimo pero he de hacerla entender que debo tener mi espacio y mi vida, ya que empiezo a ser una mujer y no una niña. Y pues me gusta ponerme mis escotes, mis tacones, maquillarme... En fin, eso es una lucha aparte.
Mi padre se llama Santiago, pero todos le dicen Santi y la verdad que pasa muchísimo de nosotros, empiezo a sospechar si sabe que tiene tres hijos... Bueno creo que sí no veas la bronca que nos cayó cuando le quemamos el sofá, fue idea de mi hermano mayor pero nos comimos todos la charla, mi hermano Manuel, el mayor, por cabecilla, Javier por hacerle caso al mayor y yo por dejarme ser el conejillo de indias... Mis hermanos son muy cabrones, todo lo probaban conmigo y yo me divertía así que me parecía bien que me usaran. Una vez me cortaron el pelo como un chico solo para saber si a Javier le quedaría bien un nuevo corte de pelo, a mi madre no le hizo gracia y yo cada vez que me miraba en el espejo no paraba de reir...
Manuel, Javier y yo hemos estado siempre muy unidos y seguimos estandolo, solo que cada uno sigue su camino y ahora pasamos más los unos de los otros pero siempre estamos juntos y sobretodo nos protegemos bastante y si no fuera por mis hermanos más de una vez me habría quedado tirada en algún lugar...
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¿Y si fueras tú?
Romance¿Te imaginas no creer en el amor y que llegue alguien y te cambie la vida? Marta es una chica de 16 años , la cual se juro así misma que nunca creería en el amor. Pero en esta vida nunca se puede decir nunca...