Madurez

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Era ya de mañana, vi la hora...¡mierda la alarma! Me saqué los audífonos y apagué la música.Me había quedado dormida con la música prendida, bueno lo poco que pude dormir, estaba nerviosa, era la primera vez que me cambiaba de colegio, sería "la nueva" ¿y si no me aceptaban?, ¿y si me hacían bullying?, ¿ y si pierdo a mis amigos? el hecho de pensar en que quizás no los volvería a ver nunca más me entristecía, pero no tenía tiempo para entristecerme. Me vestí flash y bajé a la cocina, mi mamá estaba viendo el matinal.

-Hola mamá-. dije somnolienta.

-Hola hij..¡Mierda, Jess, sube al auto vamos a llegar tarde!-.dijo mi mamá arrastrandome.

Apenas comí y no alcancé a lavarme los dientes,  tomé mi cepillo le eché pasta, subí al auto y me los fui lavando de camino, me enjuagué con el agua mineral de mi mamá, me sequé en la ropa y mi mamá chilló.

-No te limpies en la ropa Jess- dijo mi madre

Cuando mi madre se enoja, alega como media hora y es como si estuviera retando al viento porque no me deja hablar. En fin, el trayecto fue algo largo, aún cuando mi madre iba como a 150km/h y yo iba todavía un poco dormida.
Cuando llegué al colegio se me cayó la boca, metafóricamente, era un colegio enorme, parada en la vereda sentí como si estuviera en las puertas del cielo, cerré la boca, me despedí de mi mamá y entré, y por no querer entrar con mi mamá me perdí en el colegio, por suerte encontré a una chica y me indicó la sala, le agradecí y me encaminé al salón, era obvio que sería grande al igual que el colegio en si, entré y trate de llamar la atención lo menos posible, me senté al final y un chico me miró y se rió, me indicó la cara y yo saqué el espejo y me miré, tenía pasta de dientes, me quise moriiiir, al menos fue el único que se dio cuenta de mi presencia, le agradecí y observé el ambiente. Se me llenaron los ojos de lágrimas cuando vi a todos esos amigos que se abrazaban y se saludaban después de no verse en tanto tiempo y recordé a mis amigos, ellos ahora estarían haciendo lo mismo sin mi, pero este colegio era importante también, para mi vida y mi futuro.
Entró el profesor y me llamó la atención que fuera tan joven (y guapo), entonces me llamó e hizo que me parara a su lado y me presentara al curso, como nadie se había percatado de mi presencia, se asombraron al verme, llegué al frente y dije "Hola me llamo Jessica y tengo 17 años", todos quedaron sorprendidos y más tarde supe que era la mayor del curso. Me senté ya que no quería hablar de mi y el profesor empezó a hacer un repaso de la materia, entre la materia que no entendía y lo guapo que era el profesor no fue mucho lo que me quedó en la cabeza.
Cuando salimos de clases todos se pararon, recogieron sus cosas y se fueron, como no sabía donde iban sólo los seguí, al salir el profesor me dice con una sonrisa encantadora "Jess Bienvenida".
Me derretí, literalmente. Me desmayé.

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⏰ Última actualización: Apr 10, 2016 ⏰

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