No me puedo creer la que se ha liado en un momento.
¿Por qué propongo un juego en el que salir ganando es salir perdiendo?
¿Por qué sabiendo que estabas enamorado me meto?
¿Por qué no dejo de liarla?
¿Para qué me meto?
Oh no, no.
Te has enamorado.
No te voy a mentir, estaba en mis planes.
¿Para qué te ilusiono?
Es la segunda vez que me asusto y salgo corriendo.
Parece mentira que no me conozca.
Bueno, ¿ahora tú que pintas aquí?
¿Para qué me escribes y me ilusionas?
¿De verdad te gusto?
Mira, si es necesario te enamoro a ti también.
¿Por qué eres tan posesiva?
Solo quiero mimos.
Me duele que me no me respondas.
Saca tema, lo que sea, hablemos.
Eres increíble, pero como amigos eh.
¿Por qué me invitas? ¿Qué pinto yo aquí?
Dios, qué incómodo, se nota que todos lo saben.
Sé directo al menos.
Gracias por llevarme a casa.
Bonito coche.
Por favor, no me miréis ni me habléis.
Bueno, tú si que puedes.
¿Por qué me llamas tanto la atención?
Tus manos son muy suaves.
Ese momento se me hizo eterno.
Noté algo en tu mirada.
¿Quieres salir a correr?
¿No viene tu amigo?
Corramos solos entonces.
Deja de sonreírme así, porfa.
Hala.
Verás
Tú
La
Hostia.
Me niego a decir que me gustas.
Me gustas.
Invitadme.
Narcisista.
Ana, basta ya.
¿A donde quiero llegar?
¿Por qué me quieres?
¿Por qué me da miedo quererte?
No puedo.
Ya.
Me vais a hacer daño.
Joder.
