capitulo 1:Traición y destierro

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XX_Hace 8 años_XX

El gremio de FairyTail se encontraba durante sus típicas mañanas, algunos miembros se encontraban hablando, otros bebiendo y otros discutiendo. Entre ellos se encontraban un grupo de niños reunidos.

"Hoy sera el día, definitivamente encontrare algo sobre Igneel!" Dijo un pequeño niño de cabellera rosada.

"Natsu, estas seguro que quieres ir hoy?" Le dijo una pequeña niña de cabello plateado.

"Si cerebro de llama, siempre regresas llorando como un bebe." Dijo un niño de cabello oscuro.

"Dejalo, se mira lindo cuando llora." Dijo otra chica de cabello plateado y aspecto gótico.

"Mira, deja de alentarlo, puede ser peligroso." Dijo una niña pelirroja con una armadura.

"No importa lo que ustedes digan, definitivamente encontrare a Igneel! Ya lo verán!" Dijo Natsu antes de correr fuera del gremio.

"Deberíamos seguirlo?" Dijo Gray.

"Me preocupa que siempre salga solo, algo podría pasarle." Dijo Lissana.

"Dejen que vaya solo, así aprenderá que en la vida hay muchas decepciones." Dijo Mira con tono indiferente.

"Mira!" Exclamo Erza. Luego las dos chicas comenzaron a discutir entre ellas. Mientras que todos apostaban por quien seria la ganadora, se olvidaron del pequeño Dragon Slayer que hace tan solo unos momentos había salido gritando por la puerta del gremio.

EN LAS AFUERAS DE MAGNOLIA.

"Ya verán todos, encontrare a Igneel y les demostrar que si puedo hacer lo que me propongo." Dijo Natsu refunfuñando por la actitud de sus compañeros con el.

Natsu continuó su búsqueda durante algunas horas llegando a un plano desértico en el que no se veía muchas cosas al rededor. Tenía hambre y ya se encontraba cansado de toda su búsqueda pero no se daría por vencido, aun cuando ya había caído la noche estaba dispuesto a encontrar aunque sea una pequeña pista que le ayudara a encontrar a su padre adoptivo.

Se detuvo por un momento para observar a la distancia si había algún pueblo cerca; sin embargo, a lo lejos dentro del desierto, pudo ver como el reflejo de llamas y el humo llenaban lo que parecía ser un espacio habitado.

"Sera... Igneel!" Dijo el pequeño antes de correr hacia donde se encontraba el fuego, con la esperanza de que fuera su padre. Después de algunos minutos de recorrido, se acerco lo suficiente como para notar lo que estaba sucediendo, se trataba de un pueblo que se encontraba en llamas, podía escuchar los gritos de los habitantes que estaban dentro del pueblo. Natsu se encontraba en pánico, así que comenzó a comerse las llamas que consumían al pueblo para tratar de ayudar, pero sus intentos fueron en vano, pues aun había muchas llamas.

Con sus sentidos mejorados de Dragon Slayer alcanzo a escuchar una conversación de algunas personas cerca de donde se encontraba.

"Señor Crawford, hemos exterminado a todas las personas del pueblo como nos lo solicito."

Natsu, furioso por lo que acaba de escuchar, corrió en dirección de las voces y se encontró con un hombre corpulento, con poco cabello en su cabeza y una extensa barba dividida en dos. Acompañado a cada lado por dos hombres de aspecto intimidante.

Corrió sin ser visto por las 3 personas y salto para atacar al hombre gordo desde las alturas derribándolo y empezando a golpearlo con solo sus puños.

"Como pudo hacer algo tan cruel, desgraciado." Dijo Natsu entre lágrimas. Los acompañantes de aquel hombre se lo quitaron de encima, lo golpearon en el abdomen y lo arrojaron al suelo.

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