Mi padre y mi madre tenian un taller en Jalisco de imprenta, Mi padre y mi hermana manejaban el taller. Estas vacaciones, me exigieron ir a ayudarles, si no mi padre me quitaria el dinero que me daba para la semana.
-Pasame la lona.
Agarre el pedazo de plastico que se encontraba en el piso, y lo arrastre hacia ella.
El cuarto del taller en donde ella se encontraba, tenia una cortina, asi que practicamente da a la calle, y puedo observar todo.
-No la arrastres, la vas a ensuciar.
Se la di y me recargue en la mesa en donde se hacian los recorte, de las calcamonias o eso.
-¿Ya viste?
-¿Que?
-Esa chica te esta viendo.
Observe hacia la calle, estaba una chica bajando del bus. Me estaba observando, fijamente.
Camino hacia el taller, pero paso de el.
No era de esas chicas que las ves por que tienen unas curvas o algo en el fisico, era de esas que cuando te veian, su mirada te llama la atencion, que te es imposible dejar de mirar.
-Ve al otro cuarto y pasame los ojuelos.
Camine sin dejar de mirar a la chica.
Este es el caso, los dos y unicos cuartos del taller se conectan, uno de esos, pues es el que da a la calle y el otro, tiene puertas que tambien dan a la calle, pero... tiene de esas calcamonias en donde tu puedes ver para afuera, pero las personas que se encuentran afuera, no pueden ver adentro, solo ven su reflejo.
Pude notar que la chica se detuvo un poco para observar su reflejo, cambio su expresion, parecia que me estaba viendo, pero se estaba viendo a ella misma, su expresion era algo triste.
-¿Viste eso?
-¿Que?
-Me pudo ver.
-Eso es imposible, tu sabes.
Sabia lo que mi hermana queria decir, pero algo me decia, que no le gustaba ver su reflejo.
La chica no era bonita, pero no necesitaba serlo para llamar la atencion. Iba con unas botas negras, algo grandes. Y su peinado, no tenia ninguno, o al menos eso parecia.
Se me hacia conocida, pero nunca le tomo mucha importancia, por que pues, soy asi.
