La Vida de Eli

24. Buenas noticias

Mi vida aquí en Italia por los momentos no tiene diversión, han pasado seis días, Mateo sigue intentando y mi mamá esta encantada con él, casi que me suplica para que salgamos y ya abrió su tienda y estoy orgullosa de ella, Luisa sigue sin recuperar su memoria y sigue haciendo preguntas, le hablé sobre lo que nuestro padre hizo y no se lo tomó muy bien...

–¡Aaaaah! ¡No puede ser! Esto no es justo ¿Como mi padre pudo dejarme así? Y tú, tú nunca estuviste aquí para mi, eres despreciable, ¡Una mala hermana! –gritó con todas sus fuerzas.

–Luisa... No... Escúchame, siempre te quise, eres mi hermana pero yo estaba muy lejos de aquí. Lamento mucho no haber hecho algo. Entiendo que te sientas así porque yo también viví con él. Pero mírate Luisa, estás viva y ahora si estaré contigo siempre, lo prometo –dije llorando.

–Tienes razón... Gracias –dijo calmándose y me acerco a ella para abrazarla.

–Siempre pequeña, siempre... –dije y ella se quedaba dormida. Escuché la puerta abrirse.

–¿Que pasó? –dijo Mateo apresurado.

–Nada... Ya pasó, ahora todo estará bien –digo secándome las lágrimas.

–Necesitas un abrazo de un doctor sexy –dice y me abraza.

–Eres lo peor doc –digo riendo entre lágrimas.

Si pues... Fue trágico y después vino el señor arrogancia "al rescate". Por otro lado, mi amistad con Mario es cada vez más grande y me encanta que se lleve tan genial con Luisa.

He estado hablando con mis amigas; Lauren tuvo que ir a la casa de los Joyce y dijo que fue una tarde amigable y diferente, todos quedaron encantados con "la novia de James" y ¿Quien no adora a Lauren?, ella está más segura de sus sentimientos hacia James pero no quiere decir nada; Alex sigue en las mismas, de fiesta en fiesta y divirtiéndose; Sophie está excelente con Blake y me alegro mucho por ellos, me dijo que él estaba mejorando y también me habló de que Marcus sabe el tiempo que me quedaré aunque no le pedí que me hablara de él; Cora está súper bien con su novio aunque últimamente han peleado un poco pero siempre se la pasan así; y por último André que sigue teniendo citas con Jacob, estoy emocionada por esta nueva parejita. Les hablé de mi hermanita y lo bien que se encuentra, del sexy doctor que quiere salir conmigo y de mi súper amigo Mario.

La pesadilla empieza mañana, iré a la universidad y sin mentir estoy muy emocionada. Con la prueba que hice mi beca salió al 100%, estudiar arquitectura es un sueño. Mi mamá ya pudo comprar la casa y está cerca de la universidad, estoy muy cómoda con eso pero todavía la están remodelando. A Luisa es posible que le den de alta hoy y estoy emocionada.

En estos momentos me encuentro en el sofá cama de la habitación del hospital escuchando música cuando escucho un golpe.

–Auch –escucho un quejido y me levanto rápidamente encontrándome con Luisa tirada al suelo. Me acerco a ella en silencio y la siento en la camilla, sólo la observo, tiene los ojos cerrados apretándolos fuertemente. No estoy acostumbrada a hablar mientras las personas pasan por un momento de dolor porque siento que eso es malo y más bien afecta. De repente abre los ojos un poco confundida.

–Creo que... Creo que recuerdo todo Liz –dice y mis ojos se humedecen, así me llamaba cuando era pequeña. La abrazo.

–Así me llamabas tú antes –la miro y ella asiente sonriendo–. Bienvenida devuelta hermana, voy a llamar a Mateo y a mi mamá –salgo y corro en busca de Mateo mientras le escribo un mensaje a mi mamá.

–¡Mateo! Recordó todo, recordó todo –le grito cuando lo encuentro y me mira asombrado.

–Elizabeth, vamos –me dice, luego se detiene y me abraza–. Que bueno Eli –dice y siento un dolor en el pecho, así me llamaba Marcus...

En la habitación Mateo le hace unas preguntas y se la lleva para que le hagan unos exámenes, mientras tanto yo le escribo tambien a Mario para avisarle que ya recordó todo. Me quedo sola un rato hasta que escucho la puerta abrir y entra mi madre con una gran sonrisa en la cara y me abraza.

–Dios, que bueno que ya recuerda todo, estuve tan preocupada últimamente por ella –dice apretándome fuerte.

–Si ma pero yo sabía que ella la recuperaría porque es fuerte –le digo–. ¿Cómo vas?

–Oh ¡Ni te imaginas! La tienda ha sido todo un éxito, me han comprado muchísimo.

–Ay que bueno ma, estoy muy orgullosa de ti –le digo y nos vemos interrumpidas por el sonido de la puerta, Mario está entrando.

–Hola querido ¿Como estás? –le dice mi madre abrazándolo fuerte, pues sí, ella también lo adora.

–¡Loren! Estoy muy bien –dice sonriendo y se acerca a mi a saludarme– ¿Y la princesita? ¿Dónde está? –pregunta por Luisa.

–Oh... Ella se fue a hacer unos exámenes con Mateo –digo y volvemos a escuchar la puerta.

–¡Hola! Volví –dice alegre Luisa, mami y Mario van rápido a saludarla mientras yo me acerco a Mateo.

–¿Como está? –le pregunto.

–Está perfectamente, le hicimos las radiografías y no tiene ningún problema –me dice.

–Uff, que alivio.

–¡Hola doc! –dice mi mamá escandalosa y lo abraza.

–Señorita Loren ¡Que bueno verla por aquí! –le dice amable.

–¿Que estás esperando para invitar a mi hija a salir? –dice y yo la miro con los ojos muy abiertos.

–¡Mamá!

–Con todo respeto Loren, ya la invité a salir muchas veces, sólo estoy esperando un "sí" de su parte –dice y volteo a mirarlo a él. ¿Una Ayuda? Mario no deja de reír, genial.

–Estamos esperando Betty, una respuesta –dice Mario y yo lo mato, Luisa me mira divertida.

–¡Vamos Liz! Sal con doc –dice Luisa feliz.

–Está bien, saldré contigo –digo sonriendo y todos gritan de la emoción. Mateo se acerca a mi.

–No te arrepentirás –dice dándome un beso en la mejilla–. Te paso buscando hoy a las 9 –dice sonriendo y se va mientras los demás festejan.

–Ustedes son malvados –los fulmino con la mirada y ellos se ríen.