8. ¿Novia?

17.6K 712 263
                                    

Cómo te pidió ser su novia.

HARRY
Harry te llevó una tarde a la sala multipropositos. Cuando estuvieron adentro pudiste notar que todo estaba decorado con casa cosa que te gustaba, pero lo que sin dudas llamó tu atención fue una repisa ubicada en el centro de la sala. Arriba había un cojín rojo escarlata con un dije sobre él.

Te acercaste seguida de Harry, él tomó el dije con cuidado y lo puso en tu mano de forma que lo apretaras. Sentiste un pequeño "Clack" y diste un salto pensando que habías roto la hermosa y pequeña snitch dorada, pero en vez de eso, esta se abrió dando paso a un papel un tanto doblado. Cuando lo abriste y leíste su contenido solo pudiste mirar a Harry y acercarte a él para abrazarlo.

Lo que decía el papel ya se lo pueden imaginar.

RON
Él te llevó a su quinta cita en el mismo lugar donde se conocieron. Cuando estaban contemplando las estrellas, Ron se levantó en seco provocando que te asustaras.

—¿Lo dirás de una vez? —preguntaste con una voz seca.

—¿El qué? —terció él algo nervioso.

—La pregunta que quieres hacerme desde que llegamos.

—Yo... esto... me preguntaba —balbuceó Ron rascándose la cabeza—... quizás tu querrías...

—Vamos, cariño —te acercaste y acariciaste su espalda en señal de apoyo.

—Quiero saber si... si... si quieres ser mi novia..

—Oh, Weasley —sonreíste tiernamente y lo besaste sin dudarlo.

—¿Eso es un sí?

—¡Claro que sí!

DRACO
Con el todo era menos elaborado y más inesperado.

Estabas por entrar a la clase de pociones junto a los demás alumnos de quinto -entre ellos Draco-, cuando el rubio te tomó del brazo y te acorraló justo en la pared antes de entrar al aula. Se acercó a ti con una media sonrisa y te besó suavemente. Cuando se separó te susurró:

—Sé que dirás que sí, pero vamos, me matarás si no te lo pregunto. ¿Quieres ser mi novia?

Tu sonreíste, asentiste y volviste a besarlo.

FRED
Él no te lo preguntó. Un día estabas en la biblioteca haciendo una de las tantas tareas de las diversas áreas -el problema de aprobar con S y E en casi todos los tomó's- cuando Fred se acercó y besó tu mejilla.

—Vreo que ahora que eres mi novia tendrás que dejar de pasar tanto tiempo en esos libros y prestarme más atención —susurro y mordió el lóbulo de tu oreja.

—¿Perdón? —dijiste tratando de ocultar tu gran sonrisa.

—¡Oh! ¡No te lo conté! ¡Que torpe! Eres mi novia. Antes de que alguien me gane ese puesto.

—Nunca me lo preguntaste, Frederick.

—Vamos, mujer. ¿Para que hacerlo si tu respuesta es obvia?

—Espera —cambiaste tu tono de voz a uno de tristeza—, si somos novios ya no podré soñar con Patch.

Fred levantó la vista de tus labios —Con un poco de magia podría ser un ángel —se acercó más a ti—, pero no necesito alas para cuidarte.

Tu volviste a sonreír como tonta enamorada.

GEORGE
Era tu última excursión a Hogsmeade con George y él todavía no te había pedido ser su novia. Eso te molestaba.

Esa tarde George te llevó a paso rápido hasta hogsmeade sin ni siquiera hablarte. Cuando te diste cuenta ya estaban en una tienda muy polvorienta al final del primer paso.

George se dirigió a una gran repisa al final del local y sacó dos pequeñas perlas color rojo escarlata (esa semana habían leído en Historia de la Magia sobre unas perlas de promesa difíciles de conseguir. Mientras ambas personas tuvieran la perla consigo, el amor se mantendría intacto)

Colocó una en tu mano y juntó sus frentes, aunque tuviste que ponerte en puntitas de pie.

—Eso significa que... —balbuceaste.

—...A menos que tú no quieras cumplir la promesa de este amor —George Sonrió.

—¿Lo prometes? —preguntaste.

—Lo prometo —respondió.

NEVILLE
Oíste el sonido de la puerta, cuando abriste pudiste divisar a un Neville acalorado y con las mejillas rojas. Lo invitaste a pasar y, luego de unas largas miradas en las que lograste entrar en su mente, dijiste:

—¿Lo preguntarás?

—sería más fácil si usaras la leger... —respondió jugando con sus dedos.

—lo hice, Nev —interrumpiste—. Pero quiero escucharlo de tu boca.

—No lo hagas más difícil, ___.

—Dilo, Longbottom —lo obligaste con una voz de seriedad y autoridad.

—Tu... quisieras... ¡Vamos tu sabes a qué me refiero! Solo di que sí —exclamo exaltado.

—Oh. Neville, tranquilo. Si no lo dices es porque en verdad no lo sientes. Te entiendo. Creo que a Seamus no le importaría tener un maratón de películas muggles y... otras cosas. Sabes a qué me refiero —dijiste despreocupada, esperando que tu novio captara la indirecta y te pidiera ser su novia.

Neville, que para entonces ya estaba rojo de furia, celos, decepción y nerviosismo, se acercó a ti y te agarro delicadamente de los brazos.

—¿Aceptas ser mi novia? —suspiró profundamente.

—¿En serio tengo que mencionar a Finnigan para que seas un Gryffindor?

—Emm...

—Si, Nev.

Y ahí estaba. Podía haber cambiado. Ser más alto, atractivo, hábil y decidido en muchos casos, pero no dejaba de ser aquel pequeño temeroso de 12 años que tanta ternura te daba.

_____________
Amé a George😍😍

𝑯𝑨𝑹𝑹𝒀 𝑷𝑶𝑻𝑻𝑬𝑹: 𝑰𝑴𝑨𝑮𝑰𝑵𝑨𝑺 𝒀 𝑷𝑹𝑬𝑭𝑬𝑹𝑬𝑵𝑪𝑰𝑨𝑺 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora