Todo el mundo me mira con desprecio y solo fingen sentir dolor cuando miran a alguien desangrándose, ya me acostumbre a que me miren como si fuera de otro mundo. Pasa el tiempo y sigo llenándome de espinas y sangrándome el corazón, estoy harta de estar rodeada de lobos y yo ser la presa, solo con mi mirada firme puedo escapar de sus garras.
Pasa el tiempo y fui bebiendo mucho dolor, en mi existe la maldad, estamos en verano pero no existe el sol para mi, yo estoy en la oscuridad rodeada de sombras, yo y mi soledad, el lamento y tratar de revivir es la ley de la muerte, prisionera de la soledad, sangrándome el corazón y llorar, y pedir a gritos mi libertad es la ley de la muerte. Agonizar y mirar al cielo, que un ángel baje y me salve es pura mentira.
Cuando pedí ayuda nadie me salvó, todos me dieron la espalda y fui pisoteada por los demás, varias veces lloré como una loca, hasta que caí en un pozo profundo en que nadie me puede sacar, espero pacientemente mi muerte para no sentir los desprecios de los demás, me cansé de llorar y ser azotada por todos, solo quiero desaparecer y dejar de existir......es la ley de la muerte.