solamente mio

Lo aburrido de la vida

La vida si que es aburrida-pensaba, todo debía seguir una típica rutina era monótona y eso realmente era estresante. Le había comentado estos pensamientos a mis padre, debido a que como todos siempre dicen que "tus padres son tus únicos amigos "y como yo no tenía debía comentarselo a alguien.
Al escuchar mis pensamientos sobre las cosas que hacían al mundo aburrido mis padres me miraban con cierto aire de preocupación ya que para ellos esto no era normal o al menos eso expresaban con sus miradas y sus caras casi pálidas.

Entonces en ese momento Mis padres empezaron a llevarme a terapias, yo contaba la misma historia siempre la cual era las causas de porqué el mundo me parecía aburrido, los doctores al escucharme se ponían pálidos y renunciaban a mi y luego de un tiempo mis padres se aburrieron de buscar a alguien.
Una tarde un Doctor se ofreció a darme una consulta ya que yo era el rumor en el hospital psiquiatra. Y a él le había interesado mi caso y decidió acudir a mi rescate. Yo aún no entendía mucho solo tenía 5 años pero debía obedecer a sus padres.

Luego de un buen rato de que mis padres hablaran con aquel sujeto se dirigió hacia mí y me llevó al despacho para hablar conmigo, yo obediente acudí y me invito a sentarme en aquélla silla de escritorio que en ese momento era más grande que yo y hacia que me perdiera.
- qué tal Sidney soy el Doctor Jordán Jhonson y seré tu doctor de ahora en adelante-yo solo lo escuchaba y no podía hacer o emitir palabra alguna pues no era buena relaciónandome con personas.
-qué ocurre Sidney? Acabo de saludar y no contestas o es que acaso eres tímida eh chiquilla-me lo decía dulcemente pero a la vez era un reproche. Entonces decidí responder-lo lamento, no soy buena para relacioname-lo dije casi en un Susurro
-Jajajajaja, eso si es extraño-dijo riendo a lo cuál yo me enfade
-no le veo la gracia-dije cruzando me de brazos y mirando hacia otro lado con una mueca de enfado
-vamos no te enfades Sidney solo bromeo-dijo el en un tono más calmado- usted no vino para bromear no es así? -le dije un tanto impaciente pues quería que esta extraña situacion terminará de una vez.
-a no? - dijo el en tono de burla a lo cuál yo estaba más enfadada pero no mostraba emoción en mi rostro así que solo opte por decir
- usted vino a saber el porque de mis pensamientos, la verdad es que esto me incómoda así que haga su trabajo - dije en un tono muy frío casi que a el lo hizo cambiar de expresion
- y dime, por qué la vida te aburre? -dijo mientras agarraba un bolígrafo y una libreta .
-simple, porque la rutina de la vida es lo mismo, nunca hay emoción.
- así? Y que clase de emoción quisieras sentir. -dijo el anotando todo lo que dije anteriormente en su libreta
-la misma emoción que siente un asesino al ver como descuartiza sus victimas-dije sin titubeos mientras agarraba uno de mis mechones blancos de cabello y me lo peinaba con los dedos. El psicólogo parecía muy confundido y a la vez tranquilo así que decidió pasar de tema.
-y dime, veo que tu apariencia es muy particular
-particular en que?
- pues tu cabello es blanco y uno de tus ojos es azul y el otro es rojo
- y eso que tiene? No soy
extraña
-jajajaj, bien Sidney es todo por hoy pequeña-dijo él haciendo un ademan de manos mientras yo respondí casi indiferente, arrastrando mi pequeño oso salí del despacho con rumbo a mi cuarto. Al parecer serían días muy largos.