El Descubrimiento

2 0 0
                                    

Por respeto y por cuestión de seguridad de cada uno de las personas involucradas en este libro, me veo obligado a cambiar el nombre de las mismas, habiendo dicho esto... durante toda mi infancia, siempre intuí que era el "niño raro" de mi familia, de mis amigos, de mis compañeros. Pero no sabía bien a que se refería dicha situación; desde que tengo uso de razón, en ningún momento me llamó la atención el poder jugar con los carros, o a las luchas, con los muñecos, es más ni siquiera salía a jugar con mis amigos del rumbo; siempre fui muy aislado, enfocándome aún más en el arte, en la música, dibujaba, me ponía a cantar; he de admitir que por la misma razón no era de tener amigos, al contrario, era considerado "el raro", "el puto", "el niña" de la unidad habitacional.

Al entrar en el kínder, recuerdo que mi familia siempre comentaba: "vas a ser todo un Don Juan, con las niñas", yo por obvias razones no sabía a qué se referían, siempre fui de estatura menor al promedio de las personas; con decirles que al tener cinco años, parecía un niño de tres. Pero aún recuerdo como me preguntaban: "¿ya tienes novia?". Yo contestaba siempre que no; pero ahí es donde comenzaba a guardar secretos, donde yo pensaba que serían para toda la vida; no me gustaba ninguna niña; claro como todo pequeño solo me enfocaba en jugar, colorear y me fascinaba la clase de música y artes. Pero lo que más me gustaba era el recreo; debido a que me juntaba con mi mejor amigo, Víctor.

Recuerdo que era el chico más lindo de todo el kínder, un amigo con el que me la pasaba corriendo por toda la escuela, me ayudaba a terminar mis dibujos más a prisa para poder salir al recreo y jugar a miles de cosas y correr como nunca. Creo que en ese momento no sabía lo que podría significar después, aún no sé si desde ahí ya sabía lo que estaba sucediendo, o que es lo que pasaba; creo que me gustaba, o era solamente el punto de que él me entendía pues recuerdo que dibujábamos casi siempre lo mismo, vaya, teníamos los mismos gustos; pero era momento de crecer, momento de seguir hacia delante. No sinantes conocer una de las situaciones más dolorosas y que es fecha donde aún nolo entiendo, solamente sé que es algo por lo que todos pasamos y todosllegaremos en algún momento, la muerte. 

Muere una de las personas que más me cuidó durante mi época del kínder, mi bisabuela materna, muchos psicólogos, amigos, incluso familiares, me dicen que es imposible que me acuerde con tanta claridad de este evento; pero la verdad es otra, es un recuerdo tan claro que tengo en mi memoria que aún es fecha donde sé que hasta el día de hoy, lo tengo como si hubiese sido ayer; yo había llegado del kínder a mi casa, mi bisabuela (Alicia), me hizo de comer, como solo ella sabía hacerlo, al terminar de comer estaba su programa favorito en la televisión, mientras yo hablaba con mi abuela (Carolina); Alicia me pide el teléfono porque quiere hablar con su hija, yo le doy el auricular y después de cinco minutos aproximadamente que estuvieron hablando, Alicia avienta el auricular dando de gritos: "¡Me duele mi cabeza... Ay, mi cabeza, siento que me va a explotar!" decía con gran voz, yo me asusté colgué, comencé a llorar; cerca de veinte minutos estuvo dando voces de dolor, llegó mi abuela Carolina, y al poco tiempo la mayor parte de mi familia, pasaron las horas y me comentaron que mi bisabuela, estaría como un angelito cuidándome desde arriba, que debía ser fuerte y luchar para que ella se sintiera orgullosa de mí. Ahora tendría a dos hermosos ángeles observándome desde arriba, Alicia y mi hermana (Mia), la cual falleció al poco tiempo de nacer.

En el momento de la primaria, al principio todo era como cualquier otro niño, aunque algo que más amaba eran los días donde habían festividades, amaba estar en los escenarios y más porque recordaba las palabras de Alicia, que me dijo alguna vez: "tú naciste para brillar, tienes que luchar por hacerlo siempre", y una de las cosas con las que yo las asociaba era para poder estar en un escenario; en esa primaria fui el niño más feliz del mundo, pero no todo siempre es felicidad. Me cambiaron de escuela cuando estuve en tercer año, ahí todo cambió...

Entré a otra primaria, y claro, ser el nuevo a veces no es nada "cool", pues ya hay grupos hechos por los compañeros y no me era nada sencillo intentar encajar y poderme acoplar a algo nuevo, para hacerlo entré en algo que se llamaba "Estudiantina", donde pude encajar rápidamente, convirtiéndome al poco tiempo en el chico estrella del momento, tenía la mayoría de los solos  y sentía que ese era mi lugar, aunque fuera de ese grupo no era bienvenido en ningún otro lugar, debido a que mi forma de ser o de manejarme fue siempre demasiado "amanerada".

En cuarto grado, fue en una clase sobre Reproducción Humana, donde se llegó a tocar el tema de la Homosexualidad, eran mediados de los 90's, demasiados tabús para aquel entonces, fue donde mi teoría era cierta, yo no nací para poder tener una relación heterosexual, al contrario, por algo me gustaban los niños, por algo me sentía por dentro como si fuera una niña, me di cuenta de mis tendencias homosexuales. 


You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: May 28, 2018 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

El ResurgirWhere stories live. Discover now