Polvo de Estrellas

Prólogo

He estado observando la vida desde distintos puntos de vista.

Creo que cuando alguien te dice que es difícil y que deberías de cerrar la boca y vomitar positivismo, lo hace porque está perdiendo la esperanza, y todos, sin importar nuestra edad, hemos pasado por momentos en los que creíamos que estábamos perdiéndola. Porque las cosas que nos pasan sean consideradas 'mínimamente malas' traen consigo un impacto (se los dice la chica que hace cinco años no podía dormir porque algo de lo que dijo ese día no le gustó).

Pero he estado aprendiendo algo sobre la vida, algo que lo he estado considerando mi as sobre la manga en momentos difíciles, y es tener esperanza en el mañana, porque va a pasar, lo que sea que esté pasando ahora, pasará, se convertirá en un recuerdo del que hables después para dar un consejo, para reírte un poco o simplemente para recordar. Eso no significa que lo que estemos haciendo ahora no importa, porque lo hace, significa que tenemos oportunidad de mejorar, de tomar lo bueno de lo que nos hirió, de ser más fuertes por ello.

Vemos los rostros de las personas al caminar y algunas veces olvidamos que estamos hechos de amor y del pasado, pero sobre todo del presente.

Este poemario es sobre levantarse, sobre sacudirse el polvo de los hombros después de caer herido, de aceptar que lo que no fue, no lo será, de perdonar, pero sobre todo de perdonarse a uno mismo, porque la vida no es los errores que cometemos, sino lo que aprendemos de ellos. Este poemario es sobre abrir los brazos a las oportunidades que esperan, pero, sobre todo; es sobre el polvo de estrellas que queda en el pasado.

Así que cariño, hagas lo que hagas, pase lo que pase, toma tu polvo de estrellas.