Te esperé

Prólogo

Al fin se había acabado el colegio, Julieta había acabado su 4to medio y al fin podría alejarse de ese colegio tóxico que la lleno de estrés y represión. Era el día de la licenciatura y todos estaban reunidos con sus amigos, ella no era la excepción.

- Chicas, ha llegado el momento de decir adiós, se que es difícil dejar ir lo que mas aman, que soy yo, obviamente, pero tienen que afrontar la realidad de que nos separaremos.

- Que exagerada eres Juli, igual nos seguiremos viendo de vez en cuando - Soltó Valentina.

- Lo sé, lo sé, pero aún así, echaré de menos no verlas el próximo año.

- Yo también las echaré de menos amigas - Soltó Vanesa con suspiro - Espero que a todas nos vaya excelente y podamos entrar a la universidad tal como planeamos, aunque no sepa que estudiar.

- Vane no comiences a llorar por favor, no quiero tener que consolarte, ya sabes, eso implica abrazarte y no quiero - Dijo Julieta con tono sarcástico.

- Uy si! Ella la que odia todo y detesta el cariño - Dijo Valentina.

- Bueno bueno bueno! Mejor comencemos a planear como será nuestra despedida, ¿si? - Dijo Julieta - Quiero ser una zorra esta noche, dicen que sólo se puede ser zorra una vez en la vida.

-¿De donde sacas tanta idiotez para decir?, me iré a la tumba con esa duda - Dijo Valentina en un tono irónico.

-De mi diccionario "Como responder a gente idiota como tú"

-¿Me dijiste idiota? - Soltó Valentina.

-No mujer, dije tú, pero no me refería exactamente a ti, me podría haber referido al perro, al gato, al señor del kiosko o la profesora de lenguaje, no sé - Sarcásticamente.

-Te amo odio, sabes. Bueno, debo ir a mi casa, mis papá me prepararon una cena aburrida de "felicidades por que al fin terminaste el colegio" y todo eso - Soltó Valentina.

-Que aburrido - Dijo Julieta en tono desanimado - Bueno hablamos en la noche.

-Hablamos - Valentina y Vanesa a la vez.

Las tres habían regresado con sus familias para cenar y celebrar la licenciatura, que es típico en las familias chilenas, aburridas y llenas de preguntas sobre, "¿Qué estudiaras?" "¿A que universidad postularas?" "¿Tendrás trabajo con eso?" Y muchas  otras preguntas que siempre le hacen a los adolescentes chilenos al terminar el colegio, como si fuese una obligación tener que pasar 10 años mas estudiando, ya era suficiente con los 12 años en el colegio, pero no, hay que seguir por que así es la ley de la vida, y es algo agotador.

Julieta, Valentina y Vanesa son unas de las muchas adolescentes que deben escoger su futuro a los 18 años, la diferencia es que Julieta sabe a lo que quiere dedicarse por el resto de su vida, mientras que las otras dos, aún se deciden sobre que harán con su futuro.

Julieta no era alguien que se interesaba por los chicos o por tener una relación, su vida era estudiar y sacar buenas notas, es por eso que el amor nunca lo tomo en cuenta. Pero lo que ella no sabe es que al ingresar a la universidad, encontrará el amor de la forma que menos se lo imagina y de quién menos se lo espera.