Capítulo 20 Maniobra defensiva

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Rojo relativo

Por Katsumi Kurosawa

Capítulo 20

Maniobra defensiva

Dos meses habían sido un tormento.

Jiyong tenía pesadillas por lo menos tres veces a la semana. Pesadillas en las que ese tipo asqueroso paseaba la lengua por todo su cuerpo mientras susurraba lo suave y delicada que su piel era.

Pesadillas en donde esposado a la cama era embestido con brutalidad y esas manos se aferraban a su estrecha cadera para hacer más certera la penetración.

Y ese líquido. Despertaba gritando por la sensación del semen mezclado con su sangre... escurriendo caliente de su entrada y humedeciendo sus piernas y las sábanas.

Jamás pudo decir el nombre de su agresor. Le daba pavor que si lo decía él volvería...

Entonces seguía teniendo esos horribles sueños.

De nuevo.

Soñaba de nuevo esos ojos agudos de Xin, mirándole con deseo mientras su cuerpo flacucho, lleno de tatuajes extraños, embestía con fuerza el delicado cuerpo del humano.

-¿Seunghyun te lo hace fuerte, bebé? –le decía lamiéndole el lóbulo y él sólo tiraba de las esposas conteniendo el vuelco en su estómago que le hacía querer vomitar todo lo que ni siquiera había comido- ¿Cómo te lo hace, bebé?

Amordazado, no había más que contestar con lloriqueos cubiertos por un pedazo de trapo sucio.

-¡NOOO! –y se incorporó en su cama, sacudiéndose la ropa como si estuviese llena de cucarachas.

-Ji... -Seung se acercó rápidamente encendiendo la luz. Dormían en la misma cama, pero sin tocarse, Ji aun le temía aunque su pánico era cada vez menor- ¿Estás bien? ¿Otra pesadilla?

-Ajá... -jadeó sudando frío y miró su abultado vientre de casi ocho meses humanos de embarazo. Pasó una mano distraídamente su mano por el bulto, logrando sólo así tranquilizarse.

-Perdona bebé... no puedo controlarlo... -le dijo tiernamente.

-¿Cómo se encuentra el pequeño...? –Seung acercó la cara al prominente vientre pegando una oreja a este, provocándole cosquillas al rubio platinado- ¿También tienes pesadillas, amor? ¡Papá está aquí! No pasa nada~ -acarició con una de sus manos libres la tela de la camiseta de su humano.

-Se está moviendo... creo que está inquieto –Jiyong cerró los ojos sintiendo ese jaleo dentro de su cuerpo, seguro el pequeño le patearía los órganos.

-Las estrellas anuncian que el día acabará... -comenzó Seunghyun a cantar, depositando pequeños besos en el vientre- Y con mucho silencio el mañana llegará... relaja tus ojos lindos, tu cuerpo también... que duermas bien... buenas noches...

-Seung no hagas eso... cuando le cantas me patea las costillas –cerró los ojos sintiendo las patadas del pequeño.

La sonrisa de Seung se extendió en su apuesto rostro tocando donde el pequeño pie se marcaba. Era tan emocionante sentir al pequeño moviéndose bajo la piel de Jiyong... no sabía qué emoción describir al saber que su hijo crecía sano y enérgico dentro del amor de su vida.

-No te atormentes... porque yo contigo a mi lado soy feliz... por más que no se cumplan... los sueños hermosos nunca morirán... -siguió con una sonrisa a lo que el humano se sonrojó furiosamente. No sólo le cantaba al bebé.

Rojo Relativo [GTOP/Baeri]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora