No te vayas [Vikturio/Plov] Yuri On Ice

Parte 2: ¿Y ahora?

Luego de semejante cosa que sus ojos vieron, decidió no pasar la noche solo, de lo contrario su cabeza no lo dejaría en paz.
Menos sabiendo estaba con el otro, juntos en el mismo hotel y cama. . .pasó la noche en la habitación de Otabek y su entrenador. Hablaron de cosas bobas como música, mascotas, a que se dedicaban fuera del patinaje y esas cosas.
Si se lo preguntan. . . Hablar con Otabek era genial. Tenían cosas en común, no lo observaba como un bebé y saber que impacto causó en él, a pesar de los años, dejaba al ruso pensativo.

Sin más que decir, durmieron a las 12 de la madrugada cuando su entrenador descubrió su pijamada improvisada.

A la mañana siguiente, luego de tomar el desayuno con ellos, se despidió diciendo daría una vuelta antes de regresar con su entrendor.

Quería olvidar un poco todo, a Viktor y el otro imbécil ¿Y si va al mar? El mar trae relajación, paz. . . Oh demonios.

Su "paz" se vio aturdida por Viktor, viendo el anillo que le dio ese estúpido ¿Qué? Ni es tan caro, es una porquería corriente de segunda.
La rabia invadió su delicado cuerpo, sin pensarlo dos veces, casi corrió llegando por su espalda. Lugar donde pateo incontables veces, hasta que se cansó.

"Viktor Nikiforov esta muerto"

Con esas palabras, capturó la atención de quien era su enamorado. . .o aún era.
Viktor sencillamente bajó a su estatura, tomando una postura burlona e inclusive engreída.

"¿Querías competir contra mi?"

Zafiros contra esmeraldas, fuego contra hielo, una guerra de miradas que ni uno ni el otro dudaba en perder.
Pero Yuri es hiriente, sabe donde atacar y como atacar. Sabe como causar daño cuando es herido

"Engreído. . . No le agradas a todos los patinadores. Retírate pronto, anciano"

Debajo de cada insulto, estaba un "Pideme perdón" , "te extraño", "te amo", "besame y dime que no me aleje más"
No sabe como decirle eso en palabras, se ciega por el coraje del día anterior.
Viktor, tomó el rostro ajeno entre una de sus manos, atrayendo al menor a su rostro.
Hizo poco caso a sus demás incoherentes insultos, cuando terminó, plantó un beso en esos labios groseros que tenía su gatito.

Al principio, Yuri se negaba, pero.  . . Pronto, sus brazos rodearon el cuello impropio, dejándose ir en ese beso. Un beso tan anhelado por ambos, un beso que robaba alientos y era toda una lengua entre ellos. Acción donde podían expresarse sin necesidad de discursos ensayados.

Al acabar separándose por culpa del aire vital, Viktor fue el primero en hablar.

--- No es verdad, solo son amuletos. Me causó rabia verte con él. . . Tenía que desquitarme de algún modo. Lo lamento, mis celos me ciegan. Solo díme que él no ha tocado tus labios o cuerpo, no quiero lo haga ni nadie más que yo.

Su semblante se tornó serio, hablaba con toda la verdad, las manos que tomaban la cintura del ruso menor apretaron su agarre, como dando a entender que conocía ese cuerpo y corazón; mas que eso era su nombre grabado con fuego en ambos lugares.

Yuri estaba embobado, sentía un raro gusto por ver como trataba de monopolizarlo.

Salió de su trance para hablar, o eso trataba entre pequeñas agitaciones por tremendo beso que se acaban de dar.

--- No, no es mi amante. Es interesante, me ayudó pues me sentía del asco. Pero no me atrae de esa forma. Eres un idiota. . . No se que decirte, no te  puedo perdonar tan sencillo. Pero . . . Confiaré en tu palabra. . .

Dicho esto, pasaron parte de su día admirando la playa. Guardando memorias, no saben como acabará eso, pero serán uno solo y por siempre. Y eso ni Katsuki, Otabek, quien sea, lo puede evitar. Ellos ya eran uno desde hace tiempo atrás, cubrir la verdad entre ellos es inútil, se nota a kilómetros

¿Qué interesa la edad? Nunca lo ha obligado a tener sexo con él, siempre tuvo que obligar a Viktor ir más alla. Por miedo, Viktor se negaba a tantas cosas, en Yuri encontró valor para amar sin ataduras  ni temores.