"Aprendi que nunca podria cambiar mi realidad, siempre seré y seguiré siendo la misma mierda"
Pimentel por fin decidió soltarme, después de volver a insultarme de unas mil formas, porque llegaron sus amigos y se fueron.
Sequé mis lágrimas con la manga de mi sueter. Entré al baño para lavar mi cara y cambiar unas gazas con las que cubría mis heridas.
Me di cuenta que el descanso dio por terminado hace unos minutos y ya iba tarde, la siguiente clase quedaba en un salón de un módulo que quedaba hasta casi al otro lado de la escuela.
A paso rápido me dirigí para allá hasta que sentí que alguien me puso el pié y yo caí de rodillas.
No me había dado cuenta que mi mochila estaba entreabierta y un cuaderno alcanzó a salirse.-Hey, idiota ¿Esto es tuyo? -levanté mi vista y era la odiosa de Alison, con su bola de amiguitas.
Es gracioso ver como todas esas niñitas van detrás de ella solo por su reputación, no por tener una amistad sincera, pues Alison las trataba como sus esclavas y ellas hacen todo por ella.
Recobré un poco mi postura y la miré fijamente, el mismo miedo que siento con Pimentel es el mismo que siento con ella.
-Vamos responde, ¿O te comió la lengua el ratón? -se burló en mi cara y sus amigas comenzaron a reír.
Ridículas. Pensé.
-Sí... es mío -dije en un hilo de voz y le arrebate el cuaderno muy rápido.
-¿Escucharon algo? -miró a sus amigas y ellas en respuesta rieron y negaron.
-No escuchamos nada, pero te puedo asegurar que estoy viendo algo demasiado horrible -agregó una de ellas.
-Es tan horrible como una cucaracha -agregó otra y todas rieron.
-Sí, yo también la estoy viendo, está enfrente de mi... -dije en un hilo de voz para que no me escucharán, desgraciadamente lo hicieron y me lleve un fuerte golpe por parte de Alison.
-Eso te pasa por tratar de pasarte de lista conmigo -jaló de mi cabello.
-Vamos Alison, no pierdas tu tiempo con esta inútil y mejor ya vámonos, de tan solo verla me causa náuseas -habló una de sus amigas.
En cuanto dijo eso, soltó mi cabello y aprovechando me dio un leve empujón que hizo que me estrellara en la pared, causando que soltara un gemido de dolor por los moretones que tenía en la espalda.
Tenía tiempo que no veía a Alice y en verdad la necesitaba en estos momentos, jamás creí necesitar a alguien, pero por lo menos no me sentía sola.
No quería hablar con ella sobre mis problemas, porque como ya lo dije, le daría "asco" y se alejaría de mí.Abrumada por los tantos insultos me dirigí a donde estaba la cancha de fútbol y me senté en las gradas.
Definitivamente ya no iba a poder entrar a esa clase, el maestro es demasiado estricto y no le gusta la impuntualidad, es más, no quería regresar a ninguna de las últimas clases.(...)
Llegué a mi casa y me encontré con un desastre total en la casa, había demasiadas cosas tiradas y escuché un llanto. Supuse que era mi madre que se dio cuenta de que mi padre la engañaba.
Caminé con ciertos nervios a la cocina y estaba sentada en el comedor y al darse cuenta que yo estaba ahí frunció su ceño y caminó hacía mí.
-¡¿Tu lo sabías verdad?!
-¿Qué? -trate de fingir que no sabía nada.
-No intentes fingir que no sabes nada sobre qué tu padre me engañaba, el dijo que te vio salir cuando lo encontraste con la otra -exclamó molesta.
-¿Y acaso tú me hubieras creído si te lo dijera? Hubieras pensado que era una mentira -se quedó callada. -Algo debiste hacer para que el actuará así.
-Sí... Ya sé que hice -me miró. -Tener a una hija que es una idiota, una inútil, que solo se la pasa encerrada, una hija que no vale nada, un error con la que de seguro dios no me bendijo, sino que me castigó.
-¡¿Y por qué carajo te embarazaste?! Existe algo llamado condón o aborto -exclamé molesta, ella solo se acercó a mí y me dio una bofetada en el mismo lugar donde Alison me golpeó.
-¡SI! ¡No sé por qué demonios no te aborte! ¡Ahora lárgate! No quiero verte -me dio un empujón.
Giré sobre mis talones y salí de ahí.
Comencé a caminar sin rumbo alguno, pero decidida a acabar con mi vida de una vez por todas.Iba a cruzar la calle y me di cuenta que venía un carro y comencé a caminar lento, el conductor comenzó a pitar pero yo no me quitaba, iba demasiado rápido como para alcanzar a detenerse y no atropellarme, yo solo cerré mis ojos para sentir el impacto.
-¡Esmeralda! ¡¿Que haces?! -me pareció escuchar la voz de Alice.
Sentí como alguien me envolvió en sus brazos y me empujó hacia el otro lado. Abrí los ojos y era Chris, inmediatamente me separé de él y vi que Alice venía corriendo hacia nosotros. -¡¿Por qué lo hiciste?! -estaba preocupada y a la vez molesta.-¡Me hubieran dejado morir! -grité entre sollozos.
-¿Por qué habríamos de hacer eso? -Alice intentó abrazarme pero yo la alejé.
-Esme ¿Que te pasó ahí? -Chris señaló mi brazo y me di cuenta que se alcanzaba a ver muy poco mis heridas, pues la manga se subió con el movimiento.
-Nada -dije en tono seco y bajé mi manga para irme de ahí y dejarlos con la palabra en la boca.
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Chica Suicida - Joel Pimentel
Fanfic"Tú no deseas morir, lo que tú deseas es alguien que te salve"