❝ Aullando a la Luna ⌜ ᴅᴄ ⌟

XXVIII

BRUCE

—No lo diré dos veces. Sí no lo haces, estarás muerto. Muerto – Muerto. —Harvey Dent, Two Face, lanzo la moneda al aire, mientras que sus dos rostros en uno sonreían de manera maligna.

El centavo cayó plenamente en la palma y el hombre se observó frente al espejo, detallando su rostro. Entonces con la mano libre, jaló la máscara, dejando ver de quien se trataba.

—¿Salió bien la voz, amo Bruce? —El murciélago apareció entre las sombras, aplaudiendo suavemente.

— Una ejecución excelente. Casi tan buena como para engañarme a mí.

Alfred sonrió ante el halago, acomodándose el traje que portaba y dejando con sumo cuidado la máscara a un lado —Los videos del señor Dent fueron de mucha ayuda. Pero para mí garganta le sigue resultando difícil emular su voz.

—Solo será por una noche Alfred, lo lograras.

—Intentaré realizar una buena actuación señor. ¿Estará listo el sujeto al que va dedicado este ejercicio?

—Lo va a estar. —Sonrió apartándose la capucha —Y hablando sobre esta prueba. Tu audiencia no será de una sola persona. Serán dos. —El mayordomo elevo una de sus cejas, escéptico.

Bruce suspiro, debía de ir a empacar. Dejaría todo en manos de Batgirl y Alfred, confiaba en que Robin y Nightwing podrían trabajar en equipo, si se lo proponían. Igual todo era una simulación.

—¿Necesita algo más, amo?

—No, gracias Alfred.

RICHARD

"Dejé a Gotham siendo un ciudadano, ahora he regresado como un turista. Al no tener donde quedarme y no deseando dormir en el hogar de Barbara... porque de seguro ocurría lo de la vez pasada, decidí quedarme en un hotel."

—... Estoy haciendo servicio al cuarto, cariñ– —Eso hizo que despertara casi de golpe y se pusiera sobre la cama en defensiva. La mucama se sostuvo de las cortinas, asustada, dejando su teléfono olvidado en el suelo —Oh Dios, disculpe, no sabía que había alguien en este cuarto.

—Disculpe. Trabajo de noche. ¿Podría volver más tarde? —¿Acaso no había visto el cartel de "no molestar"?

... No podía culparla. Dick se había colado, no había pagado por la noche. Ventajas de ser acróbata.

—Sí señor, discúlpeme. —La mujer alcanzó su teléfono y salió del cuarto. En aquel preciso momento su teléfono celular comenzó a sonar; se estiró para tomarlo.

— ¿Sí?

—Hey chico maravilla. ¿Ya te cansaste del hombre del tiempo y del servicio al cuarto?

—Y de la heladera vacía.

—¿Vas a estar ocupado esta noche?

—No es algo que te concierne, Babs. —Se dejó car en la cama.

—No te estoy pidiendo salir a una cita. Es trabajo.

—¿Estás loca? De seguro Batman ya sabe que estoy aquí. Debería de irme, hoy.