Todo comenzo en un 17 de Octubre del año 2017, era un día soleado, eran las vacaciones de verano.. Eak Eagll, un estudiante de 16 años estaba caminando por el parque con su "Carnal" Towntrap Lietth de 17 años.
—Tengo hambre wey, vamos por unos tacos acá a la esquina— Hablo el de cabellos plateados con su típico acento mexicano.
—Yo también tengo hambre, vamos a un restaurante de comida casera por un caldo de verduras, ¡Eso es más nutritivo!— Contesto el vegetariano de acento español.
El moreno fruncio el ceño —Nel carnal, esta vez me toca elegir en donde comeremos, total, te puedes comer las cebollitas que te echan en los tacos, así no te quedas sin comer— soltó una leve risa.
—Mmm! Esta bien, tú ganas esta vez =^=—.
Los dos adolescentes se encaminaron hacia el puesto de tacos más cercano que se habían encontrado, y al llegar el moreno se sentó esperando a que le tomaran la orden.
5 minutos después aproximadamente, una rubia de ojos azules se les acerco a los dos.
—¿Puedo tomar su orden?— hablo la chica con un dulce y hermoso tono de voz.
En los dos chicos se pudo observar un leve rubor color carmín en las mejillas.
—E-eh sí! Serán..— El mexicano pidió su orden sin quitar la vista de la hermosa chica que los había atendido.
—Okis! ¿Nada más?— Cuestiono nuevamente la rubia.
—Sí—
—Vale, en un momento les traeré su orden— Sonrío para después darse la vuelta y caminar hacia la cocina.
Sin duda los dos se habían enamorado de aquella chica de nombre desconocido, quien diría que una simple mesera traería como babosos a estos dos..
Para Eak los ojos de aquella chica eran como una droga, su brillo, su color.. Todo.. Sin duda había encontrado su nuevo vicio..