En cuanto abrí la puerta del departamento pude oír unos pequeños pasitos, y antes de si quiera poder cerrar la puerta sentí unos brazitos rodeando una de mis piernas.
Ni siquiera intenté retener la sonrisa que se formó en mi rostro y alcé en mis brazos a mi pequeña, que me saludaba entre balbuceos que no podía entender.
"Ya caminas" Dije y la alcé en el airé, contento de oír sus pequeñas risas.
"¡Sorpresa!" Jungkook me miraba a unos cuantos metros.
No le conteste, y sonriendo, con mi pequeña me acerque para saludarlo con un beso.
Amaba a mi familia.