Cap. 15 ¨Hospital & Sentimientos¨

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¨Cap. 15 ¨Hospital & Sentimientos¨

¨Tristeza¨

Según Wikipedia : La tristeza es una de las emociones básicas (no natales) del ser humano, junto con el miedo, la ira, el asco, la alegría y la sorpresa. Estado afectivo provocado por un decaimiento de la moral. Es la expresión del dolor afectivo mediante el llanto, el rostro abatido, la falta de apetito, etc. A menudo nos sentimos tristes cuando nuestras expectativas no se ven cumplidas o cuando las circunstancias de la vida son más dolorosas que alegres. La alegría es la emoción contraria.

Una palabra tan simple con muchos sentimientos. Así me sentía, con una tristeza tan grande que ningún ser humano sería capaz de entender. Tenía rabia conmigo misma, con la gente a mi alrededor con todo el mundo. Quería gritar, golpear todo lo que se me detuviera en el frente, pero solo hacía una cosa. Llorar. Llorar hasta que todo este dolor pasara, hasta que mi padre se recuperara, hasta que saliera el bendito médico a decir que él estaba bien.

La muerte según Wikipedia: La muerte es un proceso terminal que consiste en la extinción del proceso homeostático  de un ser vivo, esto es, la extinción de la vida.

Es increíble como se puede estar al borde de la muerte de la noche a la mañana. Teníendo una salud ¨perfecta¨ ante todos nosotros. Increíble que él no nos dijera como estaba realmente, aunque tantos años lejos de nosotros y después de la noche a la mañana aparecer para estar con nosotros, sabiendo que su salud no era la mejor. 

— ¿Familiares del señor Bunnett?— preguntó un hombre con una bata blanca.

— Nosotros.— dijo mi mamá.

 — Siento decirles que el señor Bunnett está en estado de coma, las próximas horas son crusiales para él.— dijo el médico con una sonrisa triste.

— ¿Qué fue lo que sucedió?— preguntó Nícolas, quien había llegado con mi hermano.

— Fue arollado por un automóvil, y recibió un fuerte ematoma en la área de la cabeza, cuando llego tratamos de estabilizarlo pero le dio un infarto.Pueden pasar a verlo, una sola persona a la vez; tendrán 5minutos.—dijo.

Para este punto yo no era capaz de hablar ni de ver, estaba hundida en un mar de lágrimas; quería que él estuviera bien, quería verlo enfadado al ver mi actitud, quería tantas cosas, pero como siempre no todo lo que uno quiere se puede tener.

*Nícolas P.D.V*

Cuando los de seguridad que andan con Sofía llamaron a Lucas pensamos que algo había sucedido con ella, aunque yo no lo creía así; nada más me falto al ver las lágrimas de Lucas resbalando por sus mejillas para saber que algo andaba mal. Mal no,GRAVE. Lucas no llora por una bobería.

Cuando dijo que fueramos al hospital que su papá estaba allá, supe que tenía que estar con ellos, pero en especial con Sofí. Teníamos que dejar de comportarnos como unos críos.

Sofía estaba sentada en uno de los sofás del hospital escuchando lo que el médico decía, al escuchar, la situación de su padre soltó un sollozo desgarador, y se seguía haciendo un ovillo en el sofá. Lucas fue el primero en entrar a ver a su padre, mientras yo me sentaba al lado de ella.

Le froté la espalda de manera tranquilizadora, que hizo que ella levantara su rostro para mirarme mientras las lágrimas,seguían rodando por sus mejillas, sonrojadas.

Nos quedamos mirandonos a los ojos, por un largo rato, porque con el rabillo del ojo vi cuando Luc salió y la mamá de ellos. Sentía algo más que una amistad por ella, pero no sabía que era y tampoco iba a aprovechar la manera en la que ella estaba para saber que era este sentimiento. Sequé sus lágrimas con mis pulgares.

— ¿Quieres que te acompañe a ver a tu papá? —

Asintió.

— Vamos.— dije mientras le pasaba un brazo por su cintura acercándola más a mi.— Tienes que ser fuerte, a como lo vayas a ver, allá en la habitación, él se va a recuperar y vas a estar con el. Esta claro.

Asintió.

—Gracias, esperame aquí.— murmuró, y hizo una mueca rara antes de entrar a la habitación.

No pasaron ni dos minutos que había entrado a la habitación, y se escuchaban los sollozos y el llanto más esgarador que he escuchado en mi vida. Las lágrimas comenzaron a bajar por mis mejillas, pero me las limpié antes de que me sentara al lado de la puerta. Por más doloroso que fuera el momento no debería de interumpir. No ahora. Tenía que darle su espacio con él.

*SOFÍA P.D.V*

— Gracias, esperame aquí.— murmuré, y traté de sonreír pero salió más una mueca.

Cuando cerré la puerta de la habitación me quedé paralizada, mirando todas las máquinas que estaban conectadas al cuerpo de mi padre. Tenía golpes por todos los lados que se me hacían visibles. Era algo simplemente imposible, no lo soportaba, mi cuerpo no aguantaba todo esto. Caí de rodillas al piso llorando.

Cuando pasaron los minutos y pude controlar mi llanto, me levanté y me situé a su lado, y agarré su mano.

— ¡Maldita sea, por qué carajo me haces pasar por esto, no ves que duele, duele como el infierno!¡Más te vale que salgas de ese estúpido coma!¡Mas te vale que no se te ocurra abandonarme! Te necesito para hacerte rabiar, para ver como te controlas por la ira,Tienes que verme cuando me gradúe, tienes que llevarme al maldito altar, si es que algún día me caso. Tienes que ver a tus nietos. No me puedes dejar sola, ni a mi, ni a mamá, tienes que advertirme de las cosas aunque no te haga caso.  ¡TIENES QUE SALIR DE AQUÍ!— grité.

— Sofí el va a estar bien, se va a recuperar.Ya lo verás.— dijo Nícolas abrazándome.— Vamos déjalo recuperarse.— dijo.

En ese momento la máquina que supongo que está conectada para monitorear el corazón dejo de sonar.

—¡NO!—Grité y me safé de los brazos de Nícolas.—¡PAPÁ!

— Tienen que irse de la habitación.— gritó un médico— ¡Paro cardíaco!

— Sofía vamos.— dijo,

Pero por alguna razón escuchaba su voz lejos, de pronto todo se volvió negro.

——————

*Nícolas P.D.V.*

—Sofía vamos— dije tratando de sacarla del cuarto para que atendieran bien a su padre.

Sofía se fue de espalda, pero reaccione a tiempo antes de que se callera y se diera en la cabeza.

—¡Una Camilla!— grité al ver que no reaccionaba con ella en mis brazos.

—¡LUCAS!— grité al dejarla en la camilla.

—¿Qué paso con Sofía?— preguntó

— Tú papá se puso malo, y ella se acaba de desmayar.— dije mientras corría detrás de la camilla.

*Horas más tarde*

— La señorita no despierta, pero pueden pasar a verla.

— ¿Sabe la razón de su desmayo?

—Sí, no estaba comiendo como se suponía que comiera.

—Maldición— murmuré

———

¡Chaaaan, Chaaaan!

¿Me regalan su voto? Para así saber que les gusto, y cuantas personas nos leen.

Algún error, lo arreglo más tarde. 

-M. :D

Nícolas [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora