La saga del mal [Vocaloid]

Aquella semilla

Hace mucho tiempo lejos de donde tú y yo nos encontramos. Un rey y una reina habían atestiguado el nacimiento de su heredero, o bueno, herederos. Se trataba de un niño y una niña, ambos de cabellos dorados y ojos como el cielo

-Es una niña hermosa-Dijo la reina mientras contemplaba a su retoño-Tan linda... Te llamarás Rin.

-Tú eres un muchacho fuerte- Decía el rey orgulloso de su hijo- Te pondré Len.

Los padres estaban felices mientras miraban a los bebés, ambos habían decidido organizar una gran fiesta para presentar a los nuevos príncipes. La ceremonio se daría en una mañana de Mayo, todo el pueblo había sido invitado al igual que otros príncipes, princesas, reyes y reinas. La fiesta fue un total éxito y los reyes se sentían orgullosos de sus pequeños.
El tiempo pasó y los niños habían cumplido los primeros 8 años de vida, Rin era muy inteligente y hablaba bastante bien, Len era un poco más lento para hablar y relacionarse (por no decir que era algo bobo :v).

-Beatrice, ven aquí, necesito que ayudes a Rin con su vestido- suspiraba la reina- ¡Voy majestad!- Corría la sirvienta bastante apurada

-Ay cariño, ¿Dónde está Len?- Preguntaba el rey a su reina- No lo sé, quizá en el jardín, Rin, ¿Sabes dónde está tu hermano?- miraba la reina a Rin- Está con los sirvientes en la cocina- Diji la pequeña, la cual luego desapareció para buscar a su hermano.

-¡Len!, ¡Len! ¿Dónde estás?... -Caminaba Rin por los jardines buscando a su hermano. -Aquí estoy, Rin- Decía Len desde la cocina- ¿¡Qué haces ahí!?- Decía Rin horrorizada viendo a su hermano ayudando en la cocina- Si papá te ve ahí te matará.

Len sonrió y salió de la cocina y miró a su hermana, se le acercó y le dio un pequeño beso en la cabeza. -Escucha, nadie se dará cuenta- Volvió a sonreir, Rin sonrió al igual que su hermano y le tomó la mano- Que sea la última vez que te encuentro aquí, esa gente está a nuestro servicio, si quieres algo solo pídelo a uno de ellos- Dijo Rin mientras se sentaba entre las flores del jardín.

Los reyes se habían enterado que los últimos años Len había ayudado a los sirvientes y hasta actuaba como uno, eso enfureció al Rey.

-Oye, Rin- Len se sentó al lado de Rin y la miró -Dime, Len- Len sacó una pequeña corona de flores- Hize esto para ti, princesa Rin- Rin sonrió ampliamente -¡Es muy bonita! Gracias, Len.

Len le puso la corona a Rin y sonrió exclamando -Estaremos juntos siempre, Rin. -Si Len, para siempre...

La felicidad no duraría mucho para los niños. Continuará...

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